Los cuidados que debes seguir para que la calima no afecte a tu perro

Los vientos de la borrasca Celia han traído consigo la calima, un fenómeno frecuente en Canarias y en las costas del sur de España. Sin embargo, en esta ocasión el polvo subsahariano ha teñido toda la península de color naranja desde el pasado lunes.

Las partículas en suspensión pueden afectar seriamente al sistema respiratorio, ya que llegan hasta los alveolos pulmonares. Para evitar que inhalemos el polvo en suspensión a la hora de respirar, las autoridades recomiendan no salir de casa y mantener las ventanas cerradas.

Pero al igual que a las personas, esta arenilla sahariana también puede perjudicar a los animales que conviven en casa. Obviamente esto no afecta a aquellos que viven todo el tiempo en el hogar sin necesidad de salir a la calle, como es el caso de los gatos. Hablamos, por ejemplo, de los perros que necesitan salir a la calle para caminar, hacer sus necesidades y relacionarse.

Paseos cortos y siempre hidratados

Durante estos días de calima se recomienda que los paseos con los perros se reduzcan al menor tiempo posible de exposición en la calle y se esté en ella solo lo necesario para que el perro cumpla con sus funciones fisiológicas.

Aunque este fenómeno meteorológico es perjudicial para cualquier perro, hay que extremar las precauciones con aquellos perros de más edad y aquellos con problemas respiratorios, por lo que hay que tener siempre a mano su medicación.

El moqueo, la obstrucción nasal o el picor de ojos son algunos de los síntomas que pueden experimentar los perros si se les expone al polvo subsahariano, es decir, las mismas señales que pueden sufrir las personas.

Moqueo, obstrucción nasal y picor de ojos son los síntomas que pueden experimentar los perros

Además de mantener puertas y ventanas cerradas y limitar los paseos en la calle, se debe limpiar el polvo acumulado en el interior de la casa y cuidar que los perros tengan siempre la suficiente agua fresca para que estén hidratados continuamente. Y ante cualquier reacción extraña del animal, acudir al veterinario más cercano.