Una boda en un avión con 160 invitados para evitar las restricciones del coronavirus

La segunda ola del coronavirus está azotando a India como no lo había hecho la primera. Cada día se contabilizan cientos de miles de nuevos casos y el número de víctimas no deja de crecer. Oficialmente hay más de 27 millones de contagiados y el número de muertes supera las 300.000, aunque son muchos los expertos que opinan que las cifras reales son mucho peores.

Sin embargo, a pesar de que la pandemia está en plena expansión, siguen produciéndose imágenes que no llaman precisamente al optimismo. La última la hemos visto en la región de Tamil Nadu, en el sureste del país, donde una pareja ha decidido alquilar todo un avión para casarse, junto a sus más de 150 invitados, en las alturas.

Rakesh y Dheekshana, que es como se llaman los recién casados, se habían comprometido ya en una ceremonia íntima. Sin embargo, como las autoridades de Tamil Nadu habían decretado el confinamiento estricto de la región, ellos decidieron que la solución era alquilar un avión y montar su fiesta con los invitados en las alturas.

Todos habían pasado un test

Según publica Scoopwhoop citando a la prensa local, los novios habían pedido a sus invitados que pasaran una prueba de coronavirus antes del día indicado. Aparentemente, las 161 personas que subieron al avión para acompañar a la pareja habían dado negativo, pero en las imágenes se puede ver que las mascarillas brillan por su ausencia durante la celebración.

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El Confidencial

El vídeo de la boda se ha hecho viral después de que lo subieran en las redes sociales y ha provocado una dura reprobación entre la mayoría de los usuarios que lo han visualizado. Son muchos los que aluden a los privilegios de las clases más altas en India mientras las personas más vulnerables lo están pasando mal sin poder acceder en muchos casos a los hospitales al estar colapsados.

La noticia llega después de conocerse el gesto de un hombre de 85 años, que murió hace algunas semanas en el hospital de Nagpur, en el centro de India. El hombre renunció a su cama, a pesar de que necesitaba oxígeno para respirar, para que se la adjudicaran a un hombre más joven. Dijo que él ya había vivido lo suficiente y que otras personas merecían más su cama que él.