Un cachorro recurre a su hermana mayor para enfrentarse a un gato
El felino quería dejar claro al recién llegado quién mandaba en la casa, pero no contaba con que el cachorro buscara refuerzos con alguien que le doblaba el tamaño
Ser cachorro no es fácil en el mundo, sobre todo cuando se convive con otros animales que pueden querer hacerles la vida imposible. En la vida salvaje, los padres tratan de cuidar de sus crías hasta que pueden valerse por sí mismos, pero cuando no es así, son los propios cachorros los que tienen que cuidarse de salvar su vida.
Entre los animales que viven con los humanos como mascotas, la vida es normalmente más sencilla. Cuidamos de ellos y disfrutamos de su etapa de cachorros y nos acompañamos mutuamente cuando se hacen adultos. Pero no todos los miembros del hogar pueden acoger a una mascota recién llegada con los brazos abiertos.
Es lo que le pasó a una norteamericana cuyo cachorro de Cavapoo no termina de llevarse bien con su gato. Esta raza es una mezcla de Cavalier King Charles Spaniel y de Caniches en miniatura y uno de estos animales vive desde hace pocas semanas en una casa de Nueva York junto a su dueña y un gato que le hace la vida imposible.
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La Cavapoo se llama Louie y tiene apenas cuatro meses. Trataba de ir al cuarto de baño donde estaba su dueña, pero en el medio se interpuso Marvin. El gato de la familia quería dejar bien claro quién manda en la casa a este recién llegado, por lo que se plantó en mitad del pasillo y no le dejó pasar, lanzando sus garras cuando el cachorro trataba de acercarse.
Aunque parecía que el cachorro había dado la batalla por perdida, fue en busca de refuerzos y demostró que es más lista que el gato
Louie se dio la vuelta y parecía que había dado la batalla por perdida, pero de repente salió de la zona donde su dueña estaba grabando y, al cabo de pocos segundos, regresó con refuerzos. Había ido a buscar a Leela, una perra que ya tiene año y medio y que es mucho más grande que los otros dos animales. Mientras, el cachorro iba escondido bajo el cuerpo de su hermana mayor.
Marvin no tardó en salir pitando de la zona para evitar incidentes con un animal que le doblaba en tamaño. La dueña no podía creerse lo que acababa de ver y se ríe de la situación, mientras Louie movía la cola de lado a lado celebrando que, esta vez, había sido más lista que el gato de la casa.
Ser cachorro no es fácil en el mundo, sobre todo cuando se convive con otros animales que pueden querer hacerles la vida imposible. En la vida salvaje, los padres tratan de cuidar de sus crías hasta que pueden valerse por sí mismos, pero cuando no es así, son los propios cachorros los que tienen que cuidarse de salvar su vida.