Muere una mujer con cáncer de mama que cambió la quimioterapia por la dieta vegana

“Me rompe el corazón escribir esto pero el 25 de mayo Katie, con la misma gracia y fuerza con la que ella misma se manejó por la vida, falleció”. La mujer se llamaba Katie Britton-Jordan y había sido diagnosticada de cáncer de mama en 2016. Sin embargo, decidió que no quería someterse a los tratamientos recomendados por los médicos y prefirió seguir desde entonces una dieta vegana.

En una entrevista concedida a Metro hace dos años, Katie confesaba que se sentía "bien y en forma. Aún puedo trabajar y cuidar de mi hija". Estaba convencida de que el cambio en su dieta, que ahora se basaba principalmente en frutas y verduras, le estaba ayudando a curarse. Nunca se arrepintió de una decisión que, tres años después, no le ayudó a sobrevivir.

El mensaje en la cuenta de Facebook de Katie lo ha escrito su marido Neil, que explica que en sus últimos momentos “estuvo rodeada de familiares y amigos y envuelta en amor. Delilah, su ‘mejor amiga’ Elsa y yo fuimos a recoger flores y hierbas del jardín y las colocamos alrededor de Katie, que parecía serenamente hermosa...”

Una decisión polémica

Katie fue diagnosticada hace tres años de un cáncer de mama triple negativo, uno de los más peligrosos. Entonces, los médicos le aconsejaron realizarse una mastectomía para someterse después a sesiones de quimioterapia y radioterapia. Sin embargo, esta británica de apenas 30 años decidió recurrir a una terapia alternativa que los doctores desaconsejaron: llevar una dieta vegana.

TE PUEDE INTERESAR

Una profesora con cáncer de mama tendrá que pagar a su sustituto durante su baja

El Confidencial

No quería recibir un tratamiento que la dejara postrada en la cama, como había visto a algunos de sus amigos: “Si recibiera quimio o radioterapia, creo que estaría casi siempre en la cama. He visto a amigos que reciben quimio y están afectados de por vida. Es horrible. Estás envenenando tu cuerpo. En mi opinión, hay muchas opciones que me parecen mucho más valiosas que envenenarse”.

La ausencia de tratamiento provocó que el cáncer de mama se extendiera primero a los ganglios linfáticos del cuello y después a los pulmones, el hígado y los huesos. Buscó tratamientos de inmunoterapia fuera del Reino Unido y recaudó fondos gracias a algunos de sus seguidores en Facebook, pero no surtió efecto.

Cuanto más leía sobre quimio y radioterapia, más claro tenía que no quería hacerlo: creo que estaría siempre en la cama

Katie tenía clara su decisión y nunca se arrepintió: "Cuanto más leía sobre quimio y radioterapia, más claro tenía que no quería hacerlo. Siempre había llevado una dieta saludable y no comía carnes rojas, pero decidí que me volvería completamente vegana y dejaría el azúcar y el gluten para comer, principalmente, alimentos crudos". Dos años después, Katie ha fallecido, pero nunca se sabrá si se hubiera salvado de seguir las indicaciones de los médicos.