Le robaron la comida en la 'ofi', pero vio la grabación de las cámaras
Una empresa, un almuerzo robado y un ladrón desconocido son los ingredientes de una anécdota que se ha convertido en un fenómeno viral. Te la contamos
Seguro que en tu oficina ha pasado alguna vez, o incluso tú has sido la víctima. Los hurtos de comida en las cocinas de empresa están a la orden del día. Ya sea por error o por poca consideración, no son pocos los que abren las neveras compartidas y pillan lo que más les apetece, aun a sabiendas de que no es de su propiedad. Pero como en los trabajos suele haber tanta gente, es casi imposible pillar al culpable.
El humorista Zak Toscani lo ha petado en Twitter con una historia sobre hurtos de comida ajena. No sabemos si es cierta, pero ha sido todo un éxito: el tuit prinicipal del hilo de la historia ya tiene 172.500 RT y más de medio millón de 'me gustas'. Asimismo, el mensaje cuenta con 7,9 millones de comentarios.
Los hurtos de comida en las cocinas de empresa están a la orden del día. Ya sea por error o por poca consideración, no son pocos los que roban
Veamos por qué esta estampa tan familiar (una oficina, un almuerzo robado y un ladrón desconocido) se ha convertido en un fenómeno viral.
Con la comida no se juega
A este compañero de trabajo le robaron el almuerzo, pero pidió permiso para ver las cintas de la cámara de seguridad de la cocina. Confiesa que es lo más emocionado que ha estado en el trabajo nunca antes.
Co-worker got his lunch stolen and they’ve agreed to let him watch the security camera tape. This is the most excited I’ve ever been at any job ever. Ever.
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
El almuerzo que le hurtaron no era gran cosa: arroz frito con gambas. Pero aun así, jode.
The lunch in question was shrimp fried rice which means this escalates from a misdemeanor to felony no doubt
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
El almuerzo que le hurtaron no era gran cosa: arroz frito con gambas. Pero aun así, fastidia
El humorista expone los hechos del caso: "El almuerzo estaba en nevera por menos de una hora antes de que desapareciera. No hay restos de olor de las gambas en el microondas o en el área de la cocina". Fue, estima, tarea de todo un profesional.
Case facts:
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
Lunch was in fridge for less than an hour before it vanished. No shrimp smell remnants in the microwave or kitchen area. This was a professional hit no doubt
¡BOOM! Vio la cinta de grabación. Ya sabe quién lo ha hecho... "¡Maldita sea!", exclama.
HOLY SHIT. He’s back. He watched the tape. He knows who did it.
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
Sabe quién le robó
El compañero que le robó el almuerzo a sangre fría se sienta al lado de nuestro protagonista. Es una mujer. Pero un día antes de que la investigación comenzara se ausentó del trabajo.
So the man who’s lunch was stolen sits across from me. The person who stole his lunch sits RIGHT NEXT TO ME! She left for the day before the investigation started
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
Según el vídeo, esta psicópata ni siquiera se comió la comida. "Lo sacó de la nevera y lo tiró entero a la basura". Por eso, claro, no había restos del olor del plato por la cocina...
According to the video, this psychopath DIDNT EVEN EAT THE FOOD. She took it out of the fridge and threw and buried it in the trash
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
¿Por qué lo hizo? No tiene ni idea. "Sus motivos son completamente desconocidos. No puedo decir que la culpo... No sabemos lo que esta mujer es capaz de hacer".
Her motives remain completely unknown. In lieu of what he saw on the tape he has decided to not to press the matter anymore. I can’t say I blame him. We don’t know what this women’s fully capable of
— Zak Toscani (@zaktoscani) 29 de marzo de 2018
No tomó medidas
Puntos a aclarar: él compró el arroz frito con gambas alrededor de las 11:30 AM y lo metió en la nevera, con la intención de comerlo a mediodía. Así que la 'ladrona' tenía exactamente 30 minutos para hacer lo que hizo.
Points to clarify: he bought the shrimp fried rice around 11:30am (carry out) and put it in the fridge to chill until he takes lunch at noon. So she had exactly a 30min window of time to do what she did. There was no intention of microwaving the food
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
Cuando el protagonista vio el vídeo le preguntaron que qué quería hacer al respecto, y este decidió no tomar medidas, ya que no quería ser responsable de un despido.
Update: Ok so when dude watched the video with HR they asked “what do you want to do about it?” he told them he was solely interested in who did it and that he didn’t want to be responsible for someone getting fired
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
La víctima vio el vídeo, pero decidió no tomar medidas al respecto, ya que no quería ser responsable del despido de un compañero
Una vez que él decidiera no presentar cargos, RRHH envió un correo electrónico a la compañía sobre la importancia de no robar almuerzos de la gente.
After charges were dropped, HR sent a company wide email about not stealing people’s lunches. She is scheduled to arrive at work in 20min. My blood is on cocaine
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
De pronto su compañera entra en la sala, y se hace un silencio total. "Después de que la oficina leyese todo el email, hubo una explosión de energía a través de todo el mundo". Nuestro protagonista estaba incómodo.
She has walked into the room. And the room is dead silent. Dead fucking silent yet there is a palpable explosive energy pulsing through everyone but her
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
De repente llega su compañera, la ladrona. "La veo abrir su correo electrónico y hacer clic en el email de RRHH. ¡Vamos!". Imaginamos su excitación con la situación.
From the moment she walked in, I’ve just been staring at her. Watched her open her email and now she clicked on the goddamn HR email! Holy fuck strap in - here we go!
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
Estaba más tenso que un tronco. "No puedo moverme. Simplemente, no puedo moverme. Ahora mismo podría pasar cualquier cosa".
I can’t move. I simply cannot move, anything could happen right now
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
La ladrona hipócrita
¿Qué creéis que hizo la culpable del hurto? ¿Ruborizarse? ¿Confesar? Nada más lejos de la realidad. La tía, ni corta ni perezosa, dijo en voz alta: "¡¡¡Alguien robó un almuerzo!!! ¿Quién haría algo así?". Nuestro protagonista, obvio, estaba alucinando.
!!!! After seeing the HR email she says out loud “woah. Someone stole a lunch? Who would do something like that?” !!! I may have to run out of this room
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
Después de que ella dijera eso, la víctima del hurto le contesta: "Bueno, es que no está bien tirar el almuerzo de la gente...".
After she said that, shrimp guy responds “well yea it’s not ok to throw someone’s food away” we’re all about to start screaming
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
La ladrona del arroz se hizo la tonta al leer el email de RRHH sobre el hurto. Incluso se indignó: "¿Quién haría algo así?". Muy fuerte...
Después se vuelve todo mucho más loco. La culpable se percata de que su compañero ha sido la víctima. "Oh, ¿fue tu almuerzo? ¿Y por qué irías a RRHH para eso?", exclama, dejando a su compañero de chivato y soplón.
This shits about to get crazier. After he says that she goes “oh it was your lunch?” BEAT she continues “well why would you go to HR about that?!”
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
She has simultaneously denied her involvement AND called the guy who saved her job a snitch!!!!!!!!!
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
El protagonista decidió no decir nada al respecto, porque la iba a liar parda... así que volvió al trabajo y mantuvo la calma.
Dude just sighed and went back to work after she said what she said. She looks frightwningly calm
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
Le roba por partida doble
Un total de 40 minutos después, el protagonista vuelve a escribir y dice que siguen trabajando como si tal cosa, y que sigue con su compañera la ladrona a su lado.
This is real. This is happening. We know who did it but we don’t know why. It’s a post production company so we’re in fact open today. She’s been sitting 3ft from me this whole time
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
No dice nada a nadie, y pide tres platos de arroz frito con gambas. Le serán entregados en mano.
Unbeknownst to the guy and the woman, I just ordered 3 shrimp fried rice plates for lunch and will be hand delivering them
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
¿Imagináis lo que pasó luego? Seguro que no. Para evitar ser robado por partida doble, evitó meterlos en el frigorífico, así que se los quedó él mismo. ¿Qué hizo la ladrona después? "Me quitó el arroz con una gran sonrisa en la cara. Ahora se lo está comiendo, disfrutándolo. Esto es crueldad absoluta".
She took the fried rice from me with a big smile on her face. She’s eating it and loving it. This is utter ruthlessness
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
"Me encanta el arroz frito con gambas", dice la ladrona mientras saborea su plato.
“I LOVE shrimp fried rice” - the thief
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
El protagonista, como no puede ser de otra forma, alucina. "Parece que nunca sabremos por qué lo hizo. Quizá no sepa que lo hizo. De cualquier manera, ahora estoy obligado a trabajar 40 horas semanales con un ser humano al lado de una absoluta sangre fría".
I wish I could close this up with a neat little bow, but, it appears that we may never know why she did it. Maybe she doesn’t know she did it. Either way I’m now forced to work 40hrs a week next to a cold blooded individual
— Zak Toscani (@zaktoscani) 30 de marzo de 2018
Muy fuerte... ¿Qué explicación le dais a todo esto? ¿Es una psicópata? ¿Pensaba que no sabía que la habían pillado? ¿Odia a su compañero en silencio y por eso le hizo todo eso?
¿Te ha pasado algo parecido alguna vez, lector? ¡Cuéntanoslo!
Seguro que en tu oficina ha pasado alguna vez, o incluso tú has sido la víctima. Los hurtos de comida en las cocinas de empresa están a la orden del día. Ya sea por error o por poca consideración, no son pocos los que abren las neveras compartidas y pillan lo que más les apetece, aun a sabiendas de que no es de su propiedad. Pero como en los trabajos suele haber tanta gente, es casi imposible pillar al culpable.