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¿Sufres de disfunción eréctil? ¿La cosa no va? Acaban de descubrir la causa
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Los problemas sexuales empiezan en la infancia

¿Sufres de disfunción eréctil? ¿La cosa no va? Acaban de descubrir la causa

La teoría de Freud avalada por la ciencia: un estudio descubre que los fracasos sexuales masculinos podrían estar relacionados con relación que tiene con su madre.

Foto: ¿Qué pensarías si resulta que tu suegra fuese la culpable de tus problemas en la cama? (iStock)
¿Qué pensarías si resulta que tu suegra fuese la culpable de tus problemas en la cama? (iStock)

Como en otros muchos casos, parece que la teoría psicoanalítica de Sigmund Freud no estaba tan desencaminada y el complejo de Edipo, que se desarrolla en los varones entre los 3 y los cinco años y que se basa en el desarrollo de sentimientos amorosos hacia sus madres, puede prolongarse en la edad adulta.

El término tomado de la tragedia griega de Sófocles Edipo Rey –en la que el personaje de Edipo terminaba matando a su padre para ocupar su puesto y casarse con la reina Yocasta, su madre– se utiliza para definir un conjunto de emociones y sentimientos infantiles que se caracterizan por la presencia de deseos amorosos y hostiles hacia sus progenitores: amor hacia la madre y odio y rivalidad con el padre, en el caso de la acepción positiva que el padre del psicoanálisis le dio a dicho complejo.

Esta “representación inconsciente a través de la que se expresa el deseo sexual o amoroso del niño”, suele desaparecer sin mayores consecuencias a partir de los 6 años, pero, tal y como explicaba Freud, podría reaparecer durante la pubertad “afectando a la elección del objeto que abre paso a la sexualidad adulta”.

Una reciente investigación se ha planteado la posible influencia de estos sentimientos de la infancia en los problemas de disfunción eréctil –que se calcula que afectan a nivel mundial a alrededor del 18,4% de los hombres mayores de 20 años–. Los resultados obtenidos demuestran que los fracasos sexuales masculinos podrían derivar de la relación que tienen con sus madre.

Como indica el estudio, publicado en Journal of Sexual Medicine, si los varones mantienen una relación tensa con sus progenitoras durante la niñez ésta podría traducirse en problemas sexuales durante la edad adulta. Quizás esta pueda ser otra de las razones por las que tu suegra no te cae demasiado bien.

Ni buen sexo ni amor

La idea del estudio era averiguar si el estado mental de un hombre durante su infancia podría afectar a su estado físico a largo plazo. Para ello, contaron con una muestra de 960 hombres de entre 15 y 88 años a los que les preguntaron por sus hábitos sexuales –desde si sufrían eyaculación precoz hasta su duración media mientras practicaban sexo–, cómo eran las relaciones con sus madres y a qué edad se enamoraron por primera vez.

Así, la investigación, realizada en la Universidad Charles de Praga, encontró que además de la disfunción eréctil, los hombres con relaciones tensas con sus madres podrían tener también problemas al mantener relaciones afectivo amorosas y tardan más en decir la palabra amor o reconocerse enamorados, lo que podría sugerir algún conflicto permanente con respecto a la sexualidad y la intimidad.

Todo empieza en la niñez

El estudio determina que “los factores psicógenos –cuando una enfermedad física se deriva de un estrés emocional– pueden jugar un papel importante”. Es decir, tras analizar cómo eran sus relaciones sexuales frente a las que tuvieron de niños y mantenían como adultos con sus madres, encontraron que los problemas emocionales de un hombre en su etapa infantil y adolescente pueden derivar en problemas físicos en su vida posterior.

Aunque el estudio no es concluyente y no sirva para sentenciar que los problemas de dormitorio están relacionados con otros psicológicos provenientes de la infancia, sí que sugiere que existe un vínculo entre los dos.

Principales causas de la disfunción eréctil

La disfunción eréctil afecta a un gran número de hombres en todo el mundo. Aunque se trata de un problema que puede llegar a arruinar la vida sexual de un hombre adulto, apenas un 10% –si llega– decide acudir a un médico para ponerle remedio.

Sus causas pueden ser muchas: desde el estrés, falta de confianza, problemas de ansiedad o dificultades para concentrarse, hasta, otro tipo de problemas psicológicos más graves que podrían afectar directamente a sus formas de relacionarse en la intimidad, y que necesitan de ayuda para diagnosticarse y tratarse.

Es importante acudir a un especialista para encontrar la solución más idónea en función de la causa. En algunos casos, soluciones tan sencillas como hacer ejercicio o mantener una alimentación saludable pueden ayudar a terminar con el problema mientras que en otros será necesario recetar algún tipo de medicación.

Como en otros muchos casos, parece que la teoría psicoanalítica de Sigmund Freud no estaba tan desencaminada y el complejo de Edipo, que se desarrolla en los varones entre los 3 y los cinco años y que se basa en el desarrollo de sentimientos amorosos hacia sus madres, puede prolongarse en la edad adulta.

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