Cada 40 segundos una persona se suicida en el mundo (y aún más lo intentan)
Más de 800.000 personas se suicidan anualmente y el 75% de ellas son de países de bajos y medios ingresos, según un pionero informe de la OMS
Más de 800.000 personas se suicidan anualmente y el 75% de ellas son de países en vías de desarrollo, según el primer informe sobre el tema elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). A nivel mundial, los suicidios representan un 50% de todas las muertes violentas registradas entre hombres y un 71% entre mujeres
El estudio, presentado hoy, revela que cada 40 segundos una persona se suicida en el mundo, pero la cifra de aquellas que lo intentan y no lo consiguen es mucho mayor. Cuando una persona intenta suicidarse y falla es probable quelo intente una segunda vez y lo consiga. Además, dado lo sensible del asunto, los técnicos de la OMS creen que las cifras pueden ser aún mayores.
Aunque los índices de suicidio son más altos entre las personas mayores de 70 años, globalmente entre la población de entre 15-29 años el suicidio es la segunda causa de muerte. Debido a esta situación la OMS considera el suicidio como “un problema mayor de salud pública” que, lamentablemente, no se trata como tal. Sólo 28 países en el mundo cuentan con un plan estratégico para prevenir el suicidio de su población, y únicamente unos 60 recopilan datos de los suicidios llevados a cabo.
En los países ricos se suicidan tres veces más hombres que mujeres, pero en los de ingresos bajos y medianos la relación hombre:mujer es mucho menor, de 1,5 hombres por cada mujer. A nivel mundial, los suicidios representan un 50% de todas las muertes violentas registradas entre hombres y un 71% entre mujeres.
La OMS señala el estigma y el tabú en torno al suicidio como la principal causa que evita que tanto los familiares como los gobiernos traten el tema de forma abierta y efectiva. De hecho, en muchos países el suicidio es un acto ilegal, por lo que se tiende a obviar oficialmente.
“A pesar de que los datos científicos indican que numerosas muertes son evitables, el suicidio con demasiada frecuencia tiene escasa prioridad para los gobiernos y los decisores políticos”, asegura el resumen ejecutivo del informe de la OMS. El conocimiento acerca del comportamiento suicida ha aumentado enormemente en los últimos decenios, pero el estigma sigue presente. “Aumentar la conciencia social y acabar con el tabú es una de las claves para que algunos países hagan progresos en la lucha contra el suicidio”, asegura el informe.
Un problema con múltiples causas
Con respecto a las causas del suicidio, en los países desarrollados esta práctica se relaciona con desórdenes mentales, provocados especialmente por el abuso del alcohol, y con la depresión. La identificación temprana de estos trastornos y su manejo eficaz son fundamentales para conseguir que las personas reciban la atención que necesiten.
Sin embargo, como la gran mayoría de los casos se dan en países pobres, la principal causa de los mismos es la presión y el estrés por problemas socioeconómicos. Además, muchos casos de suicidio se dan en personas que han tenido que superar un conflicto bélico, un desastre natural, violencia física o mental, abuso o aislamiento.
Asimismo, los índices de suicidio son también altos entre las personas que sufren discriminación, como los refugiados y los inmigrantes, las lesbianas, los gais, los bisexuales, los transexuales y los reos.
Respecto al método empleado, el 30% de los suicidios se deben a envenenamiento por pesticidas –en zonas agrícolas deprimidas–; otros sistemas comunes son el ahorcamiento y el uso de armas de fuego. El informe de la OMS apunta que la restricción del acceso a estos medios utilizables para quitarse la vida es un elemento clave de la prevención del suicidio. Sin embargo, las políticas de restricción de esos medios (como la limitación del acceso a plaguicidas y armas de fuego o la colocación de barreras en los puentes) requieren un conocimiento de los métodos preferidos en diversos grupos de la sociedad, y de la cooperación y colaboración entre múltiples sectores.
Más de 800.000 personas se suicidan anualmente y el 75% de ellas son de países en vías de desarrollo, según el primer informe sobre el tema elaborado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). A nivel mundial, los suicidios representan un 50% de todas las muertes violentas registradas entre hombres y un 71% entre mujeres