La niña cristiana acusada de blasfemia, en una cárcel común de Pakistán
Rimsha Masih tiene 13 años. A pesar de su edad y de padecer síndrome de Down, ha acabado en una cárcel paquistaní para adultos. Fue acusada de blasfemia
Rimsha Masih tiene 13 años. A pesar de su edad y de padecer síndrome de Down, ha acabado en una cárcel paquistaní para adultos. Fue acusada de blasfemia por quemar unas páginas del Corán, en un incidente todavía por aclarar. Pero ni su condición de menor ni su enfermedad, ni la similitud del caso con otros sucesos de presunta blasfemia -en los que no hay pruebas materiales y todo se basa en acusaciones de testigos, a menudo motivadas por venganzas personales- han impedido a las autoridades paquistaníes encarcelar a la menor en la prisión de Adiala, en la ciudad de Rawalpindi. Por si fuera poco, su familia tuvo que huir por miedo a las represalias de los integristas musulmanes.
Rimsha Masih tiene 13 años. A pesar de su edad y de padecer síndrome de Down, ha acabado en una cárcel paquistaní para adultos. Fue acusada de blasfemia por quemar unas páginas del Corán, en un incidente todavía por aclarar. Pero ni su condición de menor ni su enfermedad, ni la similitud del caso con otros sucesos de presunta blasfemia -en los que no hay pruebas materiales y todo se basa en acusaciones de testigos, a menudo motivadas por venganzas personales- han impedido a las autoridades paquistaníes encarcelar a la menor en la prisión de Adiala, en la ciudad de Rawalpindi. Por si fuera poco, su familia tuvo que huir por miedo a las represalias de los integristas musulmanes.