Los hermanos Johann y Georg Schmidberger son la quinta generación de una herrería que se ha hecho famosa por encargarse de abastecer al cuerpo de la guardia suiza del Vaticano.
Uno de los problemas para fabricar las armaduras de estos profesionales es que cada vez es más difícil encontrar mano de obra especializada. El primer encargo (allá por 2009) consistió en 80 armaduras, de las cuales ya quedan muy poquitas por terminar. Johann asegura que la guardia suiza está protegida para, al menos, dos siglos.
Armaduras, espadas, cascos... Desde este taller de Molln (Austria) sale todo lo necesario para que la guardia suiza lleve a cabo su labor protectora.