Ford B-Max al descubierto

Ford lanzará al mercado español en octubre su nuevo B-Max, el único vehículo del mercado que no tiene de pilar central, lo que facilita el acceso al interior del habitáculo. Un coche de pequeñas dimensiones que aporta nuevos aires en el tráfico urbano.

Con el B-Max, la marca Ford propone otra forma diferente de entender el automóvil de dimensiones reducidas basada en la versatilidad y en la amplitud interior. Se trata de un vehículo de las dimensiones de un Fiesta pero que gracias a sus puertas traseras correderas y que se desplazan hacia atrás y a su mayor altura ofrece una gran habitabilidad interior.

Además, la ausencia de pilar central permite un acceso y una movilidad interior mucho mayor que en cualquier otro vehículo del mercado. Y eso pese a sus dimensiones reducidas. Ese detalle de no tener pilar central, es decir que su interior queda diáfano cuando se abren las dos puertas, hace que este coche sea único en el mercado en estos momentos.

Un coche parecido es el Opel Meriva, que cuenta con puertas que abren en sentidos contrarios, la de delante hacia delante y la de detrás hacia atrás, pero en el caso del Meriva si hay un pilar central que limita en parte los movimientos y el acceso al interior.

El nuevo Ford B-Max es por ello una interesante apuesta para aquellas personas que se mueven sobre todo por la ciudad y que buscan un coche compacto por fuera pero amplio y versátil por dentro. Además, resulta ideal para familias con niños pequeños, ya que con este tipo de puertas se puede hacer mucho más fácil la operación de entrar al vehículo o ajustar el asiento de un niño o ayudarles a acceder al interior.

Una de las características destacadas del nuevo B-Max es que el respaldo del asiento delantero se puede plegar totalmente hacia delante, lo que aporta más posibilidades de uso, lo mismo que su asiento trasero abatible por partes para conseguir aumentar su maletero en función  de las circunstancias.

El B-Max es un interesante e innovador concepto de coche, porque ofrece una buena utilización del espacio, pero conviene recordar que se trata de un vehículo pequeño. Su longitud total es de 4,07 metros, y aunque está muy bien aprovechado, tampoco se pueden hacer muchos excesos. Y el mejor ejemplo es su maletero, que tiene una capacidad homologada de 318 litros.

No hay mucho espacio en cuanto a anchura. Aunque el habitáculo está pensado para cinco personas, tres en el asiento trasero, la limitada anchura de 1,75 metros y el hecho de que la puerta corredera se come más espacio que una puerta normal  hace que sea estrecho.

En su apartado mecánico, el nuevo modelo de Ford ofrece dos motores de gasolina y otros dos diesel  además de una opción de gasolina con motor 1.6 de 105 CV con cambio Powershift. En el caso de los propulsores de gasolina, se trata del 1.0 Ecoboost, motor tricilíndrico con turbo, en sus variantes de 100 y 120 caballos ya empleadas en el Focus. Y en diesel hay dos alternativas, el 1.5 TDCi de 75 CV y la variante más potente es el 1.6 TDCi de 95 caballos.

Hablando de consumos, y esto es algo importante con los tiempos que corren y con el precio de los carburantes disparados, el mejor valor lo consigue la variante con el motor TDCi de 95 caballos que consume según los valores homologados 4,0 litros cada 100 km.

Por contra, el consumo más elevado se sitúa en los 6,4 litros del 1.6 de 105 CV con el cambio Powershift. Un  dato interesante, la cifra homologada de la variante más potente de gasolina, con el motor 1,0 de 120 CV se sitúa en los 4,9 litros, una cifra muy buena para la potencia y prestaciones que ofrece el vehículo.

Las primeras entregas del innovador modelo urbano de Ford, el B-Max, comenzarán en el mercado español en octubre y en cuanto a sus precios, parten de los 15.900 euros en el caso del gasolina de 100 CV con el acabado básico.