Opel Adam y las bicicletas

El pequeño Adam, la nueva apuesta de Opel en el segmento más pequeño, se presenta en el próximo Salón de París, a finales de septiembre, con un estilo personal y un aire muy juvenil. Se trata de una fuerte apuesta de la marca alemana para rivalizar con vehículos como el Fiat 500, el Audi A1 o el propio Mini que están teniendo mucho éxito comercial. Opel quiere ofrecer un producto que se salga de lo convencional en este difícil segmento de los vehículos de corte urbano. Y en el que se pueda personalizar todo para hacer de cada coche un ejemplar único.

El nuevo Adam, que se pondrá a la venta en enero en España, basa su estrategia en un estilo diferenciador y en una buena batería de elementos para personalizar los acabados. Entre ellos, destaca el sistema de transporte FlexFix, para llevar bicicletas de forma fácil y segura, y que es único en su segmento. Un equipamiento que Opel ya ofrece en otros modelos de su gama.   

Este sistema está integrado en el paragolpes trasero y siempre está disponible. Se ajusta a mano y no se necesita ninguna herramienta para activarlo. Cuando no se necesita va escondido y pasa totalmente desapercibido.

Puede transportar una bicicleta de hasta 30 kg de peso y con un adaptador se puede incorporar una segunda bici de otros 20 kg. El sistema facilita la colocación de la bicicleta sin tener que realizar mucho esfuerzo. Incluso cuando está cargado el FlexFix se puede inclinar para tener acceso al maletero del Adam. Además, para mejorar la seguridad y las maniobras de aparcamiento con el FlexFix cargado, el Adam puede equipar asistente al aparcamiento trasero.

El Adam ofrecerá desde su lanzamiento tres acabados diferentes: el Jam, el Glam y el Slam, además de una gran gama de colores para el interior, exterior, guarnecidos y techo. Todo ello para permitir unas grandes posibilidades de personalización.  

El FlexFix es un elemento que coloca al nuevo Adam entre los vehículos polivalentes destinados a un cliente dinámico y con un estilo de vida diferente.