Opel Insignia OPC, una berlina muy deportiva

La marca alemana Opel afila sus garras con una nueva versión de su berlina Insignia recién lanzada al mercado. Bajo las siglas OPC se esconde un buen deportivo de altas prestaciones pero con una carrocería más funcional. Será una novedad mundial en el próximo Salón de Barcelona que abrirá sus puertas al público el próximo día 8 de mayo.

Hace meses que se habla mucho de la versión de enfoque más deportivo del Insignia que sigue completando la gama de un modelo al que pronto llegará al mercado también la versión familiar. Hace unas semanas se ha podido ver alguna versión camuflada de este vehículo en las proximidades de la planta de Figueruelas, pero ahora ya es una realidad.

La versión OPC, que se presentará en Barcelona, ha sido desarrollada por la división Opel Performance Center en la que se desarrollan este tipo de versiones más deportivas. Es, por decirlo de alguna manera fácil de entender, el equivalente de la división M en BMW o de AMG en Mercedes.

El nuevo modelo incorpora un motor de gasolina turboalimentado de seis cilindros en V. Es el mismo propulsor de la versión tope de gama del Insignia normal al que los técnicos del departamento OPC han incorporado todos los ajustes necesarios para hacer de él un vehículo de prestaciones deportivas.

Así, la potencia aumenta desde los 260 caballos de aquel hasta los 325 del Insignia OPC. Con ello, su velocidad máxima está autolimitada en 250 km/h, mientras que acelera de 0 a 100 km/h en menos de seis segundos. Un buen registro para una berlina de aspecto algo más tranquilo.

En el nuevo modelo se incorporan una serie de elementos aerodinámicos para aguantar de alguna forma el aumento de prestaciones y al mismo tiempo ofrecerle una estética algo más diferenciada. Los principales cambios se encuentran en su frontal. Comparado con las versiones menos potentes del Insignia, el OPC muestra un espectacular frontal con dos grandes entradas de aire verticales y un paragolpes trasero específico con las dos salidas del escape integradas.

Las llantas de 19 pulgadas son de serie en esta versión, y como opción se ofrecen unas de 20 pulgadas con las que el coche gana aún más en deportividad y en personalidad.

Los técnicos también han revisado el chasis del Insignia. En esta versión OPC se ha rebajado la altura en 10 mm respecto a las versiones Sport AWD. También se incorpora un nuevo eje delantero. Se mantiene el esquema de tipo McPherson, pero los ingenieros del Opel Performance Center han desarrollado una evolución llamada HiPerStrut. Con ello se consigue un mejor tacto de la dirección y unas menores vibraciones del volante.

El Insignia OPC incorpora también de serie el sistema de suspensión adaptativa FlexRide, pero no es el mismo que el empleado en la berlina normal. Mientras que en estos ofrece dos posiciones para que su conductor elija entre una más confortable y otra deportiva, en el caso del Insignia OPC ofrece tres: el modo normal, el modo Sport una tercera para una conducción deportiva más radical, el denominado OPC.

Por primera vez en la gama OPC, el sistema de tracción a las cuatro ruedas Adaptive 4x4 y el diferencial trasero autoblocante de control electrónico (eLSD) son de serie.