Así es Doñana, el Parque Nacional amenazado por un incendio devastador

El Parque Nacional de Doñana se ha convertido en foco de atención por el incendio que se ha originado en sus proximidades. El fuego se registró en el paraje La Peñuela de Moguer (Huelva) a las 21.30 horas del sábado 24 de junio, y enseguida se extendió a Matalacañas. De hecho, la playa de esta última localidad se encontró incomunicada por carretera durante un tiempo.

El fuego ha hecho que se ponga el foco sobre el Espacio Natural de Doñana, un lugar que tal y como se indica en la página web del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, supone “la confluencia de un conjunto de ecosistemas que dotan al Parque de una personalidad única”. Entre esos ecosistemas destacan las playas, las dunas y los cotos que forman parte de un paisaje de singular belleza.

Doñana es tan diverso que alberga una biodiversidad única en Europa, en la que destaca la marisma por encima de todos sus ecosistemas. Por su “extraordinaria importancia como lugar de paso, cría e invernada”, este Parque es un enclave de especial relevancia para miles de aves europeas y africanas. Además, en su entorno conviven especies únicas y en peligro de extinción, como el águila imperial ibérica y el lince ibérico.

En el Centro de Cría en Cautividad de El Acebuche, en Doñana, ha muerto un ejemplar de esta última especie a consecuencia del estrés motivado por el desalojo de las inmediaciones. El incendio provocó que los linces del centro fueran capturados y transportados hasta otros lugares y, como consecuencia, la hembra llamada 'Homer' perdió la vida al no poder superar el estrés de los cambios.

El paraíso para las aves en Andalucía

Con sus más de 190.000 hectáreas, el Parque Nacional de Doñana es uno de los grandes atractivos naturales de Andalucía. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994, su privilegiada situación entre África y Europa le permite ser lugar de paso y estancia para múltiples aves durante sus periodos de migración. La importancia de Doñana es tal que ya en 1854 se mencionó la zona en 'Avifauna de Doñana: catálogo de las aves observadas en algunas provincias andaluzas' –del antropólogo y geólogo Antonio Machado Núñez–, por su altísimo valor natural.

Antes de pasar a ser propiedad del Estado, el Parque Nacional de Doñana estuvo en manos del XIX duque de Medina-Sidonia hasta el año 1900. En ese momento, Guillermo Garvey adquirió la finca y consiguió devolverle todo el esplendor que había ido perdiendo con el paso del tiempo. No fue hasta la década de los 60 cuando el Gobierno compró parte del territorio, y en 1964 se creó la Estación Biológica de Doñana. Cinco años más tarde se firmó el decreto que hacía del territorio un Parque Nacional.

En 1998 tuvo lugar el desastre de Aznalcóllar, una riada de residuos tóxicos provenientes de una mina cercana que no llegó a afectar a Doñana pero que impulsó el programa 'Doñana 2005' –con él se buscaba la regeneración hídrica de las marismas–.