Los afines al 'errejonismo' dimiten en bloque en Podemos Madrid para forzar primarias

Se consuma el órdago lanzado por los partidarios de Íñigo Errejón a los de Pablo Iglesias. Los miembros del consejo autonómico de Podemos Madrid afines aErrejón han presentando su dimisión en bloque. Nueve de sus miembros, que se suman a lasalida del ya exsecretario de OrganizaciónEmilio Delgadoeste lunes, por diferencias con el secretario general, Luis Alegre, persona de la máxima confianza de Pablo Iglesias. Una confrontación entre'errejonistas' y'pablistas'en que los primerostratan dede forzar la renovación de órganosmediante la convocatoria de un congreso extraordinario y primarias. Un proceso que, según los tiempos marcados por los estatutos del partido, no se convocaría hasta dentro de tres años.

Entre los dimisionarios, destacan cuatro diputados autonómicos:Pablo Padilla, Jazmín Beirak, Olga Abasoloy Clara Serra, estas dos últimas con responsabilidades a nivel estatal en las áreas de Cultura e Igualdad, respectivamente. El resto de los nueve firmantes de la carta conjunta con la que explican los motivos de su dimisión son Loreto Arenillas, que forma parte del equipo del secretario de Organización estatal, Sergio Pascual, también afín a Errejón, Sarah Bienzobas, miembro de la ejecutiva estatal y asesora en el Gobierno municipal de Ahora Madrid, Cristina Castilloy Leticia Sánchez.

En la línea con lomanifestado por el recién dimitido Emilio Delgado, los nueve consejeros autonómicos justifican el abandono de sus responsabilidadesenel partido"debido a la deriva de este órgano [secretaría general]durante los últimos meses". El exsecretraio de Organización fue más allá que sus compañeros al criticar que "la ausencia de dirección política del órgano autonómico es paralizantey, sinceramente, no la merece ni nuestra organización en Madrid, ni todas las personas que apoyaron Podemos con su participación o con su voto”. Con todo, estos consejeros hacen hincapié en que no se trata de una división interna, sino de discrepancias, aseguran, propias de una organización democrática y plural.

El pulso dentro de la formación emergente,con epicentro en Madrid, se centra entre 'errejonistas' y 'pablistas',reeditando el contexto de confrontación internaque se vivió durante los días previos a la dimisión del exdirigente Juan Carlos Monedero. Entonces, la guerra soterrada se centraba entre los que apostaban por girar hacia la moderación, convirtiendo a la organización en una maquinaria de guerra electoral, vertical y orientada a la ventana de oportunidad, y aquellos que con Monedero a la cabeza, y el respaldo ambiguo de Iglesias, defendían recuperar la esencia fundacional del proyecto y el papel protagonista de los círculos. Los 'errejonistas' se impusieron finalmente, no sin queIglesias mostrase públicamente sus reticencias, y ahora vuelven a relucir las diferencias.

La dimisión del secretario de Organización no ha sorprendido entre los cuadros de la formación en Madrid, debido a que el conflicto venía fraguándose desde hacía semanas. El paso a un lado de Delgado se enmarca en una estrategia de presión para forzar primarias con la vista puesta en la renovación de la secretaría general. Es por ello que miembros del sector contrario al de Delgadono descartaban entoncesque se produjesenmás dimisiones en los siguientesdíasentre sus afines para acompañar esta estrategia. Es por ello quefuentes del partido en Madrid se atrevíana señalar que“el proyecto 'errejonista' empieza a hacer aguas aquí”, tras no haber sabido nadar en una dirección autonómica compuesta casi a partes iguales entre afines al número dos del partido y contrarios.

El órdago a Luis Alegre y al diputadoMiguel Vila, secretario político de Podemos Madrid, tiene como objetivo forzar una crisis interna para que, al igual que en otras comunidades, se ponga al frente una gestora, según indican estas mismas fuentes. De este modo, se acabarían convocando primarias, pero como ya se está viendo, según añaden,los 'errejonistas' no son mayoría y el consejo puede seguir funcionando perfectamente alasumir las funciones de los dimisionarios.

Hoja de ruta municipal

La dimisión en bloque de los cargos orgánicos autonómicos estuvo precedida a nivel municipal por la marcha del secretario de Organización, Pedro Barragán, y del consejero Juan Manuel Morales.El abandono de los órganos de direcciónde Barragán, que además de pertenecer a la ejecutiva local formaba parte de lamesa de coordinación de Ahora Madrid y era asesor en el distrito San Blas Canillejasde la concejala del Gobierno municipalMarta Gómez Lahoz, y el de Moralesse produjeron de manera coordinada y sin apenas generar ruido. El consejo municipal dejó constancia en unaresolución internaaprobada con 16 votos a favor, ninguno en contra y dos abstenciones: “El CCM respeta la decisión personal del compañero Juan Manuel Morales, aunque no comparte su decisión, ni las razones argumentadas para justificar su dimisión”.

La formación en Madrid celebrará uncongreso extraordinario municipal el próximo mes de abril.Su finalidad se centra en “establecer el diagnóstico, el análisis y la nueva hoja de ruta para actuar en los nuevos escenarios y en las nuevas realidades de poder institucional y de desarrollo de la organización en la ciudad de Madrid”, y de momento estádescartada la convocatoria de primariaspara renovar o ratificar la continuidad de la actual dirección. Un proceso que el secretario general municipal,Jesús Montero, justifica porque “ya se han cumplido buena parte de los objetivos y las tareas que nos planteamos en la hoja de ruta”del documento organizativo aprobado en la asamblea constituyente.