Sobrecostes millonarios, ceses y accesos sin acabar... Llega el nuevo hospital de Asturias

Lo que en principio estaba preparado para ser una fiesta en la Sanidad asturiana con la inauguración hoy del nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), el nuevo centro de referencia de la comunidad autónomaque sustituye al ya obsoleto Hospital General, se ha convertido en fuentede polémicas en la región por elretraso en la puesta en funcionamiento, los sobrecostes de las obrasyla destitución de la gerente del Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa), Celia Gómez, y de una controversia sobre los accesos viarios a las instalaciones que hasta este lunes no se resolvieronde manera oficialy que mantuvieron la incertidumbre sobre su estreno hasta horas antes del mismo.

El inicio del nuevo HUCAse remonta al año 2003, cuando el Gobierno regional, que entonces dirigía el socialista Vicente Álvarez Areces, adjudicólas obras y el traslado de las dependencias del viejo centro sanitario por 205 millones de euros. Han pasado ya casi doce años desde que se gestó el proyecto y han cambiado muchas cosas, tal y como reconoció ayer el propio consejero de Sanidad de Asturias, Faustino Blanco. Entre otras muchas cuestiones, se han modificado algunas fases del proyecto y se han producido sobrecostes que elevan el precio total del centro a casi 500 millones de euros, y eso que han tenido que esperar algunas inversiones en material sanitario de moderna estructura, debido a la crisis. Esta cantidad, en la que se incluyen los accesos de urbanización y los equipos, es consideraba excesiva por Faustino Blanco, que observa "interpretaciones erróneas"a la hora de sumar gastos atribuidos al HUCA, cuando se iban a producir igualmente en el viejo centro de referencia. En medios sanitarios y periodísticos se baraja la cifra de 95 millones de euros como complemento a las partidas inicialmente previstas.

Además, el estreno del hospital será a plazos. Este martes entra en funcionamiento el área de radioterapia oncológica con la cita médica de 18 pacientes y a lo largo de los próximos meses se irán trasladando el resto de departamentos y material quirúrgico, teniendo como fecha límite para completar su funcionamiento el 30 de junio. Lo curioso es que ya en 2009, fecha en la que estaba previsto que comenzara a recibir enfermos, ya estaban casi acondicionadas todas las obras de estructura y el entonces jefe del Ejecutivo regional llegó a protagonizar varios actos públicos para mostrar a los ciudadanos las que serían instalaciones definitivas.

En los casi 200.000 metros cuadrados construidos en lo que fueron terrenos del antiguo manicomio de La Cadellada y que ahora albergarán al nuevo HUCA, con una plantilla aproximada de 4.500 trabajadores,surgió un problema añadido, que es el de los accesos definitivos al centro, ya que se encuentra en un ramal de la autopista 'Y' que une Gijón y Avilés con Oviedo. Estos accesos, todavía no construidos, tuvieron en jaque a las autoridades del Principado y del Ayuntamiento de Oviedo, donde su alcalde, Agustín Iglesias Caunedo, recordaba hasta hace pocas fechasque aún no había petición de permiso de construcción, y su organismo no podría dar de paso su apertura sin la licencia correspondiente. Todo eran buenas palabras, pero la solicitud no llegaba, lo que hizo montar en cólera a Foro Asturias, que exigió una inmediata soluciónsobre los accesos bajo amenaza de presentar un recurso ante los tribunales. Este lunes, por fin, las dos instituciones se pudieron de acuerdo para la apertura, pero el partido de Cascos todavía no ha dicho la última palabra.

Lo que sí ha caído como una bomba en medios sanitarios y políticos de Asturias ha sidola flagrante destitución, apenas una semana antes de que se estrene el hospital de la responsable del Sespa, Celia Gómez, una profesional de la gerencia que había ocupado varios cargos en la Sanidad andaluza y que llegó a esta comunidad de manos del consejero actual. El titular del departamento quitóimportanciaal cese y lo enmarcó en los cambios frecuentes que se suceden en la Administración Pública, nombrando rápidamente como sustituto a Tácito Suárez, bien conocido en el sector. Lo significativo de este reemplazo es que Faustino Blanco ha hecho dimitir a lo largo de sus casi dos años de mandato a varios de los integrantes de su equipo inicial, cuando llegó a la Consejería en 2012, quedando como único miembro de este equipo el director general de Salud Pública, Julio Bruno Bárcena. Pero si esto es un hecho reseñable, más curioso es aún que la figura de Celia Gómez haya sido defendida a ultranza por el Simpa (SindicatoIndependiente de Médicos del Principado de Asturias), que se han caracterizado por un enconado enfrentamiento con la gerente destituida durante la huelga del sector que tuvo lugar al poco tiempo de aterrizar el PSOE en el Gobierno asturiano.