El Constitucional 'ignora' a Gallardón y obliga a Botella a echar a sus dos concejales no electos

Quinta crisis de gobierno en el Ayuntamiento de Madrid en la presente legislatura, la cuarta de Ana Botella en menos de un año. Mientras que el huracán Madrid Arena parece que ha amainado, el pleno del Tribunal Constitucional (TC) ha vuelto a romper todos los esquemas a la alcaldesa de Madrid al confirmar que todos los nombramientos de ediles no electos en los Gobiernos locales de las grandes ciudades “son nulos e inconstitucionales”. El TC da de plazo para abandonar sus puestos la publicación de la sentencia en el Boletín Oficial del Estado (BOE), algo que fuentes del Ayuntamiento califican de "inminente". En Madrid, saldrán del organigrama municipal los delegados Fernando Villalonga, responsable de Área de Gobierno de Las Artes, Deportes y Turismo, y Juan Antonio Gómez-Angulo, titular de Medio Ambiente y Movilidad, al no haber sido elegidos por las urnas.

En el auto que el Alto Tribunal hizo público ayer, se declaraba que no ha lugar a la aclaración solicitada por la abogacía del Estado, que preguntó si quienes ya estaban nombrados en el cargo podían seguir tras esta resolución hasta agotar la legislatura. Fue precisamente el ministro de Justicia, el antecesor de Ana Botella en el Ayuntamiento de Madrid, quien pidió una aclaración de la decisión judicial que tumba la ley de grandes ciudades por la que se daba más potestad reglamentaria a los municipios de gran población. Una reglamentación que fue aprobada por el PP en el Congreso en diciembre de 2003 coincidiendo con el paso de Alberto Ruiz-Gallardón de la presidencia de la Comunidad de Madrid al Consistorio madrileño. 

Desde que fueron públicas las intenciones del TC, el equipo de Ana Botella se puso a trabajar para reconstruir de nuevo un Gabinete al que le quedan pocas opciones, ya que de la lista original que el PP presentó en las elecciones de 2011, la mitad de los diez primeros puestos, los más importantes, se fueron tras la estela de Gallardón o se los ha llevado por delante la tragedia del Madrid Arena.

Ballarín y Martínez-Cubells, posibles candidatos

En los últimos días han cobrado especial fuerza dos nombres como firmes candidatos a suceder a Villalonga y Gómez-Angulo. Por un lado, Álvaro Ballarín, íntimo amigo de la familia Aznar-Botella, presidente-concejal popular del distrito de Moncloa de Madrid, conocedor del mundo de la cultura y el impulsor desde hace años de actividades culturales para los vecinos de su distrito. Suyo es el mérito, dicen sus más allegados, de acercar la ópera a los madrileños de manera gratuita. Otro nombre que suena para ascender escalafones en el Ayuntamiento de Madrid es Isabel Martínez-Cubells, que aunque siempre ha estado estrechamente ligada a Esperanza Aguirre desciende del linaje de pintores Martínez-Cubells y fue viceconsejera de Cultura y Deportes del Gobierno regional antes de convertirse en concejal presidenta del distrito de Chamberí. El currículum de la aguirrista podría servirle como aval para que Ana Botella la elija para sustituir a Villalonga al frente del departamento de las Artes.

Entre las quinielas también están los que apuestan por que Ana Botella aprovechará la salida de los dos delegados para aunar áreas y ahorrar presupuesto. También podría rescatar la figura del vicealcalde, que se esfumó cuando destituyó a Miguel Ángel Villanueva, la figura política con más peso municipal devorada por la tragedia de la noche de Halloween. En el puesto podría encajar Diego Sanjuanbenito, el hombre más cercano actualmente a la alcaldesa, oficialmente delegado de Relaciones Institucionales, aunque en realidad es mucho más en el Gabinete de la alcaldesa aupado gracias a la amistad que desde niño le unió a la familia Aznar-Botella. Sanjuanbenito es un estrecho colaborador de la alcaldesa, que elaboró el primer borrador del emotivo discurso de investidura. Además, es el número 35 en la lista del PP en las pasadas elecciones municipales, lo que le habilitaría para formar parte del equipo de Gobierno.