Antonio de Guindos elude cualquier responsabilidad en el 'caso Madrid Arena'

El exdelegado de Seguridad, Antonio de Guindos, ha tirado balones fuera en lo que se refiere a cualquier responsabilidad en el 'caso Madrid Arena'. Su cargo era político y él estaba por encima de la toma de decisiones de la seguridad u organización de un evento como el que se celebró en el recinto ferial. Los responsables directos serían en todo caso la exconcejala de Seguridad, Fátima Núñez y el jefe de la Policía Municipal, Emilio Monteagudo.

De Guindos no ha apuntado a sus subordinados directamente pero sí ha mantenido esos sus cargos eran los responsables de preparar y organizar estos eventos, según han explicado fuentes presentes en el interrogatorio ante el juez que investiga la muerte de cinco jóvenes, Eduardo López Palop.

El exdelegado, que dimitió tras conocer su imputación en el caso, ha reconocido que no se celebró ninguna reunión previa para concretar las medidas de seguridad en el Madrid Arena pero ha señalado que desconoce las razones porque él no es la persona responsable de convocar ni acudir a ese tipo de reuniones.

También ha confirmado las sospechas de las acusaciones de que los efectivos policiales enviados aquella noche del 1 de noviembre del pasado año fueron escasos, sobre todo cuando el nivel de alerta había pasado de medio a alto porque las personas que se encontraban en los alrededores del recinto podían llegar hasta el centro de la capital.

Aún así sólo había doce agentes policiales y ni siquiera actuaron para evitar el botellón en los exteriores del recinto. De Guindos ha explicado que la única razón por la que se podría haber aumentado el número de agentes hubiera sido por altercados, alguna situación de gravedad o alguna llamada de alerta, algo que según su versión no ocurrió.

De todas maneras, el exresponsable del área de Seguridad ha mantenido que él era ajeno a todo lo sucedido y fue sólo tras la tragedia cuando se informó de cuál había sido el operativo y por qué había ocurrido.

Durante las cuatro horas que ha durado el interrogatorio, ha insistido en que él estaba por encima de los distintos niveles de las competencias delegadas y son los responsables de estas áreas quienes deben tomar las medidas necesarias para la prevención y organización de un evento de estas características. Según ha relatado Abdún Núñez, uno de los abogados de la acusación, el imputado ha explicado que la información que llegó al Ayuntamiento madrileño es que se trataba de un evento privado, con seguridad privada y ambulancias privadas.

Otro de los letrados, Gerardo Viada, ha señalado que ante estas declaraciones es evidente que Núñez debe dar una explicación de todos estos extremos el día que acuda a declarar en calidad de imputada. Entre otras cosas, deberá explicar las razones por las que se dio un trato de favor a la empresa Diviertt, cuyo máximo responsable es el principal imputado en la causa, Miguel Ángel Flores, por qué no se celebró una reunión para concretar las medidas de seguridad necesarias para salvaguardar a los asistentes a aquella fiesta y por qué no se ordenó el desplazamiento de más dispositivos policiales.