Rajoy busca una estrategia electoral para el 21-O que revalide sus políticas

El jefe del Ejecutivo y líder del PP, Mariano Rajoy, se enfrenta a la difícil tarea de diseñar una campaña electoral, la de las elecciones en Galicia y País Vasco del 21 de octubre, en las que su formación no sólo se juega dos autonomías: también el apoyo del electorado a su proyecto reformista y de austeridad en el gasto. La cita en la que Mariano Rajoy está llamado a revalidar su liderazgo político ocurre precisamente cuando el Gobierno que preside pone en marcha algunas medidas tan impopulares como la subida del IVA y el recorte sanitario.  

El reto comienza este lunes en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP, que marca el arranque informal de la precampaña para los populares. Además de tratar la cita electoral y la situación económica en el arranque del nuevo curso político, como recoge la agenda oficial, Rajoy tendrá que vender algunas medidas recibidas con escepticismo no sólo por la ciudadanía, sino por algunos sectores de su partido, como la posible excarcelación del etarra Josu Uribetxeberria Bolinaga.

El "deber" antes que las promesas

La cita llega un día después de la entrevista al presidente publicada este domingo por cuatro medios europeos, en la que Rajoy no sólo defendió la necesidad de sus medidas de ajuste, sino que se mostró confiado en que su partido reeditará el éxito electoral en las próximas elecciones generales. "Estoy convencido de que cumplir con mi deber me llevará a volver a ganar las elecciones", aseguró.

El jefe del Ejecutivo también se permitió un gesto de comprensión hacia los que critican su incumplimiento del programa electoral, hecho que admitió aunque, eso sí, también justificó. "Soy consciente de que no es agradable, pero lo que me ha impedido implementar mi programa ha sido la realidad, créame que entiendo la decepción de los ciudadanos, muchos de ellos que han votado por mi partido".

El momento es especialmente delicado para los estrategas populares por la simultánea entrada en vigor, este sábado primero de septiembre, de varias medidas altamente impopulares, como la subida del IVA o la retirada del derecho a la asistencia sanitaria a los inmigrantes ilegales, acompañadas de las respectivas muestras de rechazo en las calles que se han hecho habituales desde la llegada de Rajoy a la Moncloa.

Objetivos electorales

Las elecciones vascas y gallegas le tomarán la temperatura al electorado y demostrarán el apoyo real de los votantes a las medidas que el Gobierno se afana en presentar como duras, pero ineludibles. Así las cosas, los objetivos que se marcan para los dos próximos meses de precampaña son claros: revalidar el Gobierno gallego y tratar de conseguir en el País Vasco unos resultados mejores que los que les dan las encuestas.

Rajoy ya dio ayer el pistoletazo a la precampaña gallega en la apertura del curso político en Soutomaior, Pontevedra, donde presentó a Alberto Núñez Feijóo como el "mejor presidente" que puede tener Galicia en este momento de crisis y "referente de equilibrio y responsabilidad" para el resto de las comunidades autónomas. Queda saber cuándo irá Rajoy al País Vasco para dar su apoyo al candidato de su partido, Alberto Basagoiti.

El PP tiene además que diseñar la estrategia de campaña de sus dirigentes nacionales y en concreto de su líder, y decidir cuántas veces acudirá Rajoy al País Vasco y a Galicia de aquí a la cita con las urnas.

Primera reunión del otoño caliente

El Comité Ejecutivo Nacional del PP es el órgano del partido que congrega a la dirección nacional, los presidentes autonómicos, los responsables regionales y a miembros del Gobierno, diputados, senadores y europarlamentarios. Se reunió por última vez el pasado 28 de mayo.

Mañana la cita está prevista a las once de la mañana. Después de la reunión habrá una comparecencia de prensa para explicar los asuntos tratados que protagonizará, en principio, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.