La extrema gravedad del preso etarra hace prever su pronta excarcelación

El etarra Iosu Uribetxeberría, enfermo de cáncer, será puesto en libertad casi con total seguridad en los próximos días, una vez que los médicos del Hospital de Donostia en el que está ingresado confirmen la extrema gravedad de su estado. Fuentes políticas vascas sostienen que la izquierda abertzale quiere presentar su excarcelación, que saben cercana, como el resultado de su presión sobre el Gobierno. Un tercio de los presos de ETA están en huelga de hambre para reclamar su libertad.

Uribetxeberría fue operado de un tumor de riñón en 2005 y sufre metástasis en los pulmones y otro cáncer cerebral. Ayer fue sometido a una punción pulmonar y a un TAC para conocer con precisión el alcance de su enfermedad. La semana pasada se negó a que le practicaran estas pruebas, aunque finalmente accedió a ello. El resultado de las mismas se conocerá el miércoles o el jueves y le será remitido al juez de Vigilancia Penitenciaria, José Luis de Castro, que solicitará la opinión del fiscal antes de tomar una decisión sobre la excarcelación del etarra. El Ministerio del Interior informó el pasado viernes que Prisiones valorará el informe médico “para adoptar las resoluciones que en aplicación de la legislación vigente procedan”.

Fuentes del Gobierno vasco manifestaron ayer a este diario que la excarcelación de Uribetxeberría es “un caso de libro”, y que basta la estricta aplicación del Código Penal para que el etarra sea liberado. El artículo 92.1 dicho texto legal prevé la libertad condicional para los presos “enfermos muy graves con padecimientos incurables”. El punto 3 del mismo artículo recoge que si peligra la vida del interno por su edad o a causa de una enfermedad “acreditada por el dictamen del médico forense y de los servicios médicos del establecimiento penitenciario, el juez de Vigilancia Penitenciaria podrá, previa en su caso la progresión de grado, autorizar la libertad condicional (…)”.

Protocolo para presos de ETA enfermos

Ángel Yuste, secretario general de Instituciones Penitenciarias, y Jesús Loza, Comisionado para la Convivencia del lehendakari Patxi López, llevan meses negociando un protocolo de actuación con los presos enfermos de ETA y la concreción de lo que se entiende como enfermedad grave. Fuentes del Ministerio del Interior sostienen que el caso de Uribetxeberría entra dentro de los supuestos para la concesión de la libertad condicional del citado protocolo.

El etarra enfermo, de 56 años de edad, lleva 15 años presos, desde su detención en julio de 1997 por el secuestro del funcionario de prisiones José Antonio Ortega Lara, que permaneció 532 encerrado en un zulo. Uribetxeberría formaba parte del comando que se participó en el mismo, por lo que en 1998 fue condenado a 32 años de reclusión. El pasado día 9 se declaró en huelga de hambre para reclamar su libertad y poder morir en su domicilio.

Instituciones Penitenciarias informo ayer que son 108 los presos que se han declarado en huelga de hambre, y que otros 51 han comunicado a la dirección de sus centros penitenciarios su intención de iniciar el ayuno voluntario. Veintiséis de ellos, según fuentes oficiales, harán huelga un solo día. A falta de datos oficiales, Etxerat, el colectivo de apoyo a los presos de ETA, tiene “censados” a un total de 482 internos en cárceles españolas.