Wert castiga a los autores sin los 100 millones que prometió por el canon digital

Las entidades de gestión de derechos de autor intimidan ahora menos que los mercados. Por ello, el Gobierno ha decidido sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado en el Congreso sin incluir una partida para la SGAE y el resto de estas sociedades que compense la supresión del canon digital. El Ejecutivo del PP acabó con la controvertida tasa a finales de diciembre, pero a cambio se comprometió a pagar una cifra similar a los autores con cargo a los Presupuestos. Sin embargo, en plena oleada de recortes, esa cantidad, que debería alcanzar los 100 millones de euros, ha desaparecido de las cuentas públicas.

La austeridad gubernamental ha golpeado de esta forma a las sociedades de derechos de autor, para quienes la recaudación del canon digital constituye uno de sus principales ingresos. Así, de los 316 millones que obtuvo la SGAE en 2009, 27 procedían del canon. En total, la aplicación de la tasa generaba unos 100 millones a repartir entre todas las entidades. Por ello, fuentes del sector expresaron a este diario su malestar con el Gobierno, que a su juicio incumple la normativa europea sobre el derecho a la copia privada.

La sorpresa entre los autores y la oposición política que, como el PSOE, defiende la compensación que cubría el canon, fue mayúscula al comprobar que José Ignacio Wert no había cumplido su compromiso de incluir en los Presupuestos la citada partida. El pasado 30 de diciembre, en su segundo Consejo de Ministros, el Gobierno suprimió el canon, y aseguró que las entidades de gestión recibirían una cantidad equivalente con cargo a las cuentas públicas. Una solución que buscaba acabar con una de las medidas más polémicas del Gobierno Zapatero, y que suponía cobrar por adelantado y de forma preventiva por si el consumidor acababa grabando una canción o una película con derechos de autor en un soporte informático.

Pero esta promesa no gustó nada a las entidades de gestión, que no tardaron en desconfiar, dadas las políticas de ajuste que afectan a todos los departamentos. Además, para los autores, se trata de una medida todavía más indiscriminada que hacer pagar un canon por productos electrónicos, ya que ahora el dinero debe proceder del bolsillo de todos los contribuyentes. El hecho de que los Presupuestos no contengan, por ahora, ninguna partida, no ha hecho sino confirmar las sospechas de las entidades de gestión. “El Gobierno no ha negociado nada, no ha informado de nada y lo único cierto es que no hay ninguna cantidad prevista”, señalaron fuentes próximas a estas sociedades.

Solución vía enmienda en el Senado

No obstante, fuentes del Ministerio de Cultura afirmaron a este diario que la compensación por la copia privada acabará recogida en una enmienda del Grupo Parlamentario Popular en el Senado a las cuentas públicas. Tras su aprobación este jueves en el Congreso de los Diputados, los Presupuestos se debatirán en la Cámara Alta a partir de la próxima semana, y en esa fase el Ejecutivo tiene la oportunidad de satisfacer la demanda de los autores.

Así lo apuntó de forma ambigua el secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, durante su comparecencia en el Congreso el 19 de abril, tras ser interpelado por esta materia por el diputado socialista José Andrés Torres Mora. “En cuanto al tema del canon le digo que irá por vía de enmienda —no le voy decir nada más— e irá fundamentado en su real decreto a través del derecho de acceso a la cultura consagrado en el artículo 44 de la Constitución. Pero habrá que esperar a la vía de enmienda para  determinar su cuantía, y posteriormente a la vía del decreto para definir cómo se llevará a cabo la distribución. En todo caso apelamos a la responsabilidad de quienes posteriormente tendrán que hacer el reparto correspondiente a la hora de gestionar su importe”, afirmó Lassalle. Sin embargo, la suculenta compensación por el canon digital sigue en el aire.