El PSOE dice a De Cospedal que dimita si no presenta pruebas de las escuchas ilegales

Un día después de que la secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, hiciera públicas las sospechas del PP de que dirigentes del partido no relacionados con los sumarios abiertos por corrupción son objeto de escuchas telefónicas ileales, la polémica ha continuado.

La Ejecutiva Federal del PSOE ha recordado hoy a la secretaria general del PP, que ya han pasado dos días desde que realizó sus acusaciones de escuchas telefónicas ilegales a miembros de su partido y no ha presentado pruebas, por lo que si no lo hace, debe dimitir.

Ya han pasado dos días y "todavía ni ha presentado pruebas que justifiquen sus acusaciones, ni lo ha denunciado en los juzgados", ha señalado en un comunicado el responsable de Libertades Públicas del PSOE y presidente de la Comisión de Justicia en el Congreso, Álvaro Cuesta. Por ello, Cuesta ha instado a De Cospedal a que "demuestre con pruebas sus acusaciones o presente su dimisión".

Ha señalado, además, que el PP ha lanzado una ofensiva contra el Estado de Derecho "para tapar la corrupción" que afecta a numerosos cargos y militantes de su partido. De este modo ha pedido al principal partido de la oposición que "reflexione, abandone la barricada y regrese a la cordura institucional en un ejercicio de responsabilidad democrática".

Ana Botella aconseja "haberlo denunciado"

Hoy mismo, también se podían escuchar las voces críticas desde las filas populares, ya que la teniente de alcalde y delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, ha afirmado que si la secretaria general  está convencida de que se han producido escuchas ilegales a miembros de su partido "desde luego" debería presentar una denuncia, ya que se trata de una situación "de gran gravedad".

"Si Cospedal está convencida de ello no lo dudo (que debería denunciarlo), ya que es de una gran gravedad que haya habido escuchas ilegales a personas del PP o a cualquier otra persona", aseguró la edil tras asistir a una jornada de anillamiento científico en la Casa de Campo.

Además, señaló que "afortunadamente" España vive en un estado de Derecho y "sólo se puede intervenir un teléfono si hay una orden judicial", por tanto, si se han intervenido teléfonos sin dicha orden "evidentemente hay que denunciarlo". "Supongo que a ninguno nos gustaría que nos intervinieran el teléfono sin una orden judicial", apuntó Botella. Por último, preguntada sobre si se había sentido espiada en algún momento, Botella aseguró entre risas que no, añadiendo que, de todas formas, ella no está entre los dirigentes del Partido Popular.

Zapatero exige responsabilidad al PP

Por otro lado, mientras el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, también ha exigido "responsabilidad" al PP, el partido de la oposición ha insistido en su denuncia de escuchas ilegales y ha revelado que su secretaria general, María Dolores de Cospedal, y su portavoz de Justicia, Federico Trillo, pueden tener los teléfonos "pinchados".

El PSOE ha instado de nuevo a De Cospedal acudir a los tribunales o "abandonar la política", dada la gravedad de la acusación, y jueces y policías han negado las acusaciones y han garantizado que en España todas las escuchas se hacen con autorización judicial. El presidente del Gobierno, que ha ofrecido una rueda de prensa en Lanzarote, donde se encuentra de vacaciones, no ha querido analizar las palabras de la número dos del PP, pero le ha recordado que "afortunadamente", en España la Justicia funciona conforme a los criterios del Estado de derecho.

Se ha limitado así a pedir a todos los dirigente populares "sentido de responsabilidad" en sus declaraciones. Pero el PP ha insistido y, además de los casos de De Cospedal y de Trillo, ha señalado al presidente valenciano, Francisco Camps, como otro de los espiados. Su grupo parlamentario quiere que el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, acuda al Congreso para presentar y explicar un informe con los procesos emprendidos contra cargos populares y contra socialistas.

Quieren los populares comparar los casos contra cargos del PP que "quedan en nada" con los que afectan a miembros del PSOE y de los que "no se hace ninguna clase de aspaviento público", ha explicado a Efe el secretario general del grupo, Luis Ayllón. Ante la actitud del PP, el secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, ha acusado al líder de ese partido, Mariano Rajoy, y a Francisco Camps de ser capaces de decir "cualquier cosa para obviar el vendaval de corrupción que asuela al PP".

Desde la Justicia, el vicepresidente del Consejo General del Poder Judicial, Fernando de Rosa, ha opinado que el PP debería poner en manos de los tribunales cualquier "duda que exista". "Yo respondo por todos los jueces de España que actúan de forma legal, y las escuchas telefónicas que se puedan haber efectuado, desde el punto de vista judicial siempre son bajo el control de los jueces y magistrados españoles", ha afirmado.