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El mercado pone en cuarentena a las pymes tras el escándalo contable de Pescanova
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EFECTO CONTAGIO EN LA BOLSA

El mercado pone en cuarentena a las pymes tras el escándalo contable de Pescanova

El concurso de acreedores de Pescanova y la salida a la luz de deudas no declaradas han hecho saltar las alarmas en el mercado bursátil. Se

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El mercado pone en cuarentena a las pymes tras el escándalo contable de Pescanova

El concurso de acreedores de Pescanova y la salida a la luz de deudas no declaradas han hecho saltar las alarmas en el mercado bursátil. Se teme que aparezcan más escándalos contables como el destapado en el grupo gallego y que haya nuevas suspensiones de pagos. Ante la máxima de “mejor prevenir que curar”, los inversores han decidido poner en cuarentena a las empresas de pequeña y mediana capitalización con elevadas deudas y, de forma especial, a las compañías del sector de alimentación como Deoleo, Campofrío o Natra.

Pese al repunte del 1,3% de ayer, el Ibex Medium Cap, que agrupa a un total de 19 valores de mediana capitalización, suma una caída del 1% desde que el pasado 1 de marzo Pescanova hizo públicos sus problemas de solvencia. En este tiempo, el indicador de los blue chips del mercado, el Ibex 35, se ha revalorizado un 5,2%.

“El foco de esta especie de ‘minipánico’ inversor se ha centrado en las empresas medianas y pequeñas porque se considera que tienen menos controles contables y auditorias que las grandes que integran el Ibex 35”, indica un gestor de fondos, quien añade que Pescanova ha hecho reaparecer viejos fantasmas sobre escándalos contables que lógicamente “minan la confianza del inversor”.

Así se explica que Deoleo haya caído más de un 7% desde que Pescanova solicitara el concurso de acreedores. En el mercado no se olvida que el líder mundial del aceite de oliva atravesó, hace casi tres años, por problemas similares a los que ahora sufre la empresa de congelados. La compañía, que entonces se denominaba SOS, se vio envuelta en un sonado escándalo por presuntos desvíos de fondos de los entonces máximos ejecutivos del grupo, los hermanos Zalazar, a sociedades de su propiedad. La dueña de Carbonell y Koipe estuvo a punto de quebrar, y ahora, tras una dura reestructuración de la deuda y grandes desinversiones, todavía sigue luchando por reducir unas obligaciones de 624 millones de euros que golpean con fuerza el crecimiento del grupo.

A principios de año, Deoleo comenzó a levantar el vuelo y las acciones se revalorizaron un 10%. Sin embargo, el efecto contagio de Pescanova ha vuelto a golpear el valor, que vuelve a zona de mínimos históricos. Ayer cerró a 0,26 euros.

El escándalo contable en la empresa pesquera fue el centro de las conversaciones entre los analistas que acudieron el miércoles al Investment Day celebrado por Campofrío. “Me llaman algunos clientes extranjeros y me preguntan que cuál va ser la próxima Pescanova de la Bolsa española”, comentaba un analista de uno de los primeros bancos españoles a otros colegas durante el acto en el que el consejero delegado del líder de los embutidos, Robert Sharpe, se tuvo que esforzar como nunca en mostrar los logros conseguidos por la cárnica durante 2012.

Campofrío obtuvo un beneficio neto el año pasado, un ejercicio marcado por la debilidad del consumo y la subida del cerdo, de 15,72 millones de euros, frente a las pérdidas de 54,24 millones de 2011. Además, la compañía presidida por Pedro Ballvé redujo la deuda financiera en 31 millones, hasta los 441,8. Sin embargo, las acciones han perdido casi todo lo ganado en los comienzos de año y están cerca de los mínimos marcados el pasado diciembre en 4,12 euros.

Además del efecto Pescanova, en las últimas semanas, la cotización de Campofrío se ha visto presionada a la baja por el escándalo europeo de la carne de caballo en alimentos preparados con ternera. “Nosotros nos dedicamos principalmente al cerdo”, defendió la compañía ante los analistas.

Tampoco ha sentado nada bien a Natra el escándalo de las tartas de chocolate de la cadena Ikea, lo que unido al efecto contagio por Pescanova ha hecho que las acciones hayan caído en las últimas semanas casi un 3%. El grupo valenciano productor de cacao es uno de los valores estrella del mercado continuo español. La expansión internacional y la fuerte reducción de la deuda en 2012 –de 229 millones de euros a 147- han propiciado una revalorización bursátil del 48% en lo que va de año.

“Noticias como las de Pescanova no sientan bien a un mercado que intenta subir y dejar atrás una muy mala racha. Es una nueva zancadilla a la recuperación del parqué”, afirma Rufino Gallego, director de Link Securities. Los analistas, sin embargo, confían en que el escándalo contable del grupo gallego sea aislado y que, muy pronto, los inversores vayan recuperando la confianza perdida en algunas medianas empresas y levanten la cuarentena impuesta.

   

El concurso de acreedores de Pescanova y la salida a la luz de deudas no declaradas han hecho saltar las alarmas en el mercado bursátil. Se teme que aparezcan más escándalos contables como el destapado en el grupo gallego y que haya nuevas suspensiones de pagos. Ante la máxima de “mejor prevenir que curar”, los inversores han decidido poner en cuarentena a las empresas de pequeña y mediana capitalización con elevadas deudas y, de forma especial, a las compañías del sector de alimentación como Deoleo, Campofrío o Natra.