Alemania mantiene la confianza... y también al Ibex 35 por encima de los 8.000 puntos

Dos chispazos de confianza en Alemania han bastado para que el Ibex 35 cerrara en positivo una semana que parecía condenada a todo lo contrario. Gracias a la subida del 2,05% registrada el viernes, el índice español se ha anotado un avance semanal del 0,35% y ha defendido con éxito los 8.000 puntos.

En concreto, bajó la persiana el viernes en los 8.179 puntos, todo un triunfo si se tiene en cuenta en que la mayor parte del tiempo estuvo en negativo. Se sostuvo gracias a una doble ración positiva de confianza en Alemania. La primera llegó el martes, cuando se supo que la confianza de los inversores, medida por el Instituto ZEW, ha repuntado en febrero hasta los 48,2 puntos, el nivel más alto desde abril de 2010. Ese día, el Ibex sumó un 1,4%. Y la segunda se conoció el viernes, cuando el Instituto Ifo reveló que la confianza de los empresarios alemanes también ha crecido este mes. A su rebufo, el Ibex se anotó un avance del 2,05% que le permitió cerrar la semana en positivo y volver a los números verdes en 2013, puesto que hasta la fecha sube un 0,14%.

Aunque aparentemente pequeños, estos avances tienen el mérito añadido de que se han producido en una semana repleta de incertidumbres. Han destacado tres: las dudas vertidas por la Reserva Federal (Fed) sobre la continuidad de su tercera ronda de estímulos cuantitativos (QE3) en EEUU; los débiles datos económicos de Francia; y el temor a que las elecciones italianas del domingo reactiven la crisis del euro. Pese a ello, y gracias fundamentalmente a los datos alemanes, las compras han terminando venciendo a las ventas.

El sector financiero ha sido el principal lugarteniente del índice español. Ha sobresalido Bankinter, que se ha revalorizado un 6,6% en una semana en la que ha sido noticia por su intención de preparar la venta del 49% de Línea Directa Aseguradora. Mapfre, con una subida del 5,8%, y CaixaBank, que ha sumado un 5,1%, han completado el pódium. Entre los descensos, la peor parte se la ha llevado Sacyr, que ha cedido un 5,1%, mientras que FCC, BME y Arcelor han perdido más de un 4%.

A la espera de Italia

En la deuda pública, la situación ha estado marcada por en el mercado primario por la frenética actividad del Tesoro Público. En los últimos días ha captado 8.250 millones de euros en dos de sus subastas habituales y otros 2.000 millones, pero esta vez de dólares, en una operación especial realizada en esta divisa. En lo que respecta al secundario, los inversores se han mostrado cautos a la espera de las elecciones en Italia. La rentabilidad de los bonos españoles a 10 años ha descendido en la última semana del 5,19 al 5,14% y la prima de riesgo se ha estrechado de los 358 a los 354 puntos básicos. En el caso de la deuda italiana, ha sufrido más las tensiones y el rendimiento de los títulos a 10 años ha pasado del 4,38 al 4,44%, en tanto que su prima ha escalado de los 273 a los 288 puntos básicos.

En los mercados de divisas y de materias primas, la clave ha residido en la Fed, que reforzó al dólar y enfrió al oro y el petróleo. El euro se ha depreciado esta semana un 1,4%, hasta los 1,317 dólares. En cuanto al metal precioso, ha prolongado sus caídas y con un descenso semanal del 2,4% ha reculado hasta los 1.572 dólares. Por su parte, el barril de petróleo Brent, de referencia en Europa, ha bajado un 3%, hasta los 114,1 dólares.