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Deutsche vende el 3% de una Iberdrola en ebullición tras el fin del ‘lock up’
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EN JULIO, EN PLENA CAÍDA DE LA ACCIÓN

Deutsche vende el 3% de una Iberdrola en ebullición tras el fin del ‘lock up’

Iberdrola es un hervidero. Ayer terminó el ‘lock up’ o período en el que ACS se comprometió, tras la venta del 3,7% en abril, a no

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Deutsche vende el 3% de una Iberdrola en ebullición tras el fin del ‘lock up’

Iberdrola es un hervidero. Ayer terminó el ‘lock up’ o período en el que ACS se comprometió, tras la venta del 3,7% en abril, a no vender durante 90 días más acciones de Iberdrola. La bolsa cotizó ayer con una nueva caída, esta vez del 3,5%, el final de este plazo y la refinanciación de 1.600 millones de euros de deuda vinculada a Iberdrola anunciada el viernes al cierre del mercado por la constructora que preside Florentino Pérez.

La sesión fue una locura. Sociéte Générale y UBS, los dos bancos que colocaron el 3,7% de capital hace casi tres meses, lideraron las ventas en bolsa. El francés, que asume todo el riesgo del préstamo sindicado que lideraba BBVA, se desprendió de casi cuatro millones de acciones. Y el suizo, que forzó la venta del paquete tras exigir a Pérez la amortización de un crédito de 700 millones de euros, colocó en el mercado otros 1,6 millones de títulos.  

Pero no han sido estos los movimientos más significativos en el capital de Iberdrola en los últimos días. Sólo en este mes de julio, el ‘broker’ de Deutsche Bank ha realizado ventas netas –compras menos ventas- por valor de 181,5 millones de acciones equivalentes a casi 620 millones de euros. El decir el 2,90% del capital.

“Es un porcentaje elevadísimo, demasiado alto para asociarlo a operaciones de lavado de cupón por el pago del dividendo complementario de 2011. Todo alrededor de Iberdrola estos días está desquiciado, desde la caída de la cotización hasta los grandes movimientos títulos de las últimas sesiones”, aseguran en un ‘broker’ nacional, que recuerda que la incertidumbre regulatoria y el final del ‘lock up’ están provocando ventas suculentas de inversores finales.

Desde el área de mercados de Deustche se asegura que se desconoce el origen de estas órdenes de venta, que se han producido en pleno desplome de la acción. Sólo este mes, la cotización de Iberdrola ha caído desde los 3,71 hasta los 3,07 euros. Un 17,25% que amplía los números rojos del grupo este año hasta el 36%.

Mientras, el hervidero en el que se ha convertido la contratación de acciones de Iberdrola se traslada al préstamo de valores. Las cifras son sencillamente espectaculares: sólo en la última semana se han tomado prestados más de 600 millones de títulos de la eléctrica, hasta un total de 1.308 millones de títulos, nada más y nada menos que el 21% del capital del grupo. Por lo tanto, aumenta considerablemente la presión vendedora sobre Iberdrola.

Sobre la bocina

El viernes, ACS cerró sobre la bocina la refinanciación de 1.600 millones de euros de un crédito sindicado que tenía asociado a un porcentaje del 8% de su participación en Iberdrola. La constructora presidida por Florentino Pérez ha conseguido cancelar el préstamo original y lograr una nueva línea por tres años.

Gracias al nuevo préstamo concedido por el francés Societé Generale, la constructora gana tiempo y cancela el crédito original de 1.600 millones, a cuya refinanciación se habían opuesto los principales bancos del sindicado. Según distintas fuentes financieras, el principal escollo venía de parte del BBVA, que hace un par de meses cambió su política de riesgos con algunos grandes créditos corporativos. Precisamente, en ese contexto se enmarca la salida de la entidad del que fuera director de banca mayorista, José Barreiro, que fue relevado a mediados de mayo por Juan Asúa.

Iberdrola es un hervidero. Ayer terminó el ‘lock up’ o período en el que ACS se comprometió, tras la venta del 3,7% en abril, a no vender durante 90 días más acciones de Iberdrola. La bolsa cotizó ayer con una nueva caída, esta vez del 3,5%, el final de este plazo y la refinanciación de 1.600 millones de euros de deuda vinculada a Iberdrola anunciada el viernes al cierre del mercado por la constructora que preside Florentino Pérez.