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Soria condena a las eléctricas al 'bono basura' con su reforma del déficit de tarifa
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SU DEUDA SE ACERCA A LOS 70.000 MILLONES

Soria condena a las eléctricas al 'bono basura' con su reforma del déficit de tarifa

“Algunos de los rumores que han salido se llevan por delante el 25% del beneficio”, se admite sotto voce desde una eléctrica. Y es que las

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Soria condena a las eléctricas al 'bono basura' con su reforma del déficit de tarifa

“Algunos de los rumores que han salido se llevan por delante el 25% del beneficio”, se admite sotto voce desde una eléctrica. Y es que las compañías temen que la reforma que prepara el ministro de Industria, José Manuel Soria, aseste un duro golpe a sus intereses y les condene a una calificación de 'bono basura', lo que remataría sus posibilidades de financiación. La cuestión no es baladí, en tanto las empresas acumulan una deuda superior a 68.000 millones de euros. “Nos jugamos mucho en los cambios que prepara el Ejecutivo. De hecho, la incertidumbre ya nos ha costado rebajas en los ratings. Y no parece que la cosa vaya a tocar tanto a las renovables, como las eléctricas tradicionales”, apuntan estas fuentes.

La inquietud se disparó el pasado viernes, cuando Moody’s dejaba a varias compañías del sector al borde del abismo. La agencia rebajaba la calificación de la deuda de Iberdrola, Enagás y Red Eléctrica. La sociedad de Ignacio Sánchez-Galán pasaba de A3 a Baa1, a dos escalones del bono basura. Las otras dos compañías descendían tres niveles y caían hasta Baa2, con sólo un eslabón de margen. Más inquietante, todas eran colocadas en observación para rebajas futuras. En este estatus también se sitúan Endesa y Gas Natural, que se manejan en Baa1 y Baa2, respectivamente. Ninguna se priva de coquetear con una calidad de crédito cuestionable,

“Hay formas de verlo. La principal razón que esgrimen las agencias es que también se ha bajado la calificación al Reino de España. Y algunas compañías del sector eléctrico están incluso mejor que el país”, se apunta con cierto optimismo desde una firma. El propio informe de Moody’s lo confirma. “Dados los múltiples canales de contagio que existen entre la deuda soberana y corporativa, es un reto incluso para las eléctricas más fuertes con características defensivas lograr un 'rating' de más de uno o dos escalones sobre la calificación soberana del país en que están domiciliadas”, refleja el documento.

Sin embargo, las dudas sobre la nueva regulación y el hermetismo del Ejecutivo están ayudando más bien poco. “La incertidumbre es demasiado grande. No sólo porque no se sabe qué va a hacer el Gobierno, sino porque puede tener grandes efectos en las cuentas de las eléctricas. Y el nerviosismo se acrecienta porque todas están muy baratitas y en septiembre puede venir alguien de compras…”, apunta un ejecutivo con larga trayectoria en el sector. La propia agencia de calificación admite que, aunque como compañías como Iberdrola o Endesa presentan un elevado nivel de diversificación, “el impacto de las medidas que el Gobierno anunciara en breve para el sector eléctrico con el fin de atacar el déficit de tarifa pueden ser negativas para las compañías”.

Poco rejón a las renovables

Cómo publicó El Confidencial, la pelota está ahora en el tejado del Ministerio de Hacienda, que es quien tiene que cuadrar las cuentas para atajar el problema estructural del déficit de tarifa. Se esperaba tener una respuesta en el Consejo de Ministros del pasado viernes. Habrá que esperar al próximo o incluso al siguiente. Sobre la mesa de Hacienda, un mix de medidas. Por ejemplo, el céntimo verde –que gravaría los carburantes para sufragar parte del coste de las energías verdes-, una subida del impuesto de la electricidad y una tasa general a la producción. Un impuesto nuclear o hidráulico es la medida más temida por las grandes compañías. El planteamiento ha puesto en guardia a las eléctricas, que ven cómo las energías renovables apenas sufrirían los ajustes.

Tampoco falta quien en el sector critica la apuesta de Soria por confiarse a Montoro. “Corre el riesgo de que, con el nivel de déficit público que se maneja, la recaudación extra se la acabe quedando Hacienda. El ministro de Industria tenía que haber puesto él sobre la mesa el plan, y lanzarlo de la mano de Moncloa”, explican fuentes próximas al Ministerio. De lo que todos se quejan sin excepción es de los seis meses de incertidumbre que ya soporta el sector. “Es verdad que el riesgo país juega, pero también ha habido en el pasado rebajas de rating por el nivel de dudas que hay en torno a las compañías. Y cuanto peor es la calificación, más difícil resulta financiarse”, se remacha desde una de las empresas afectadas.

En el caso de Red Eléctrica (REE), los temores de las agencias parecen justificados. No en vano el Ministerio de Industria ya avanzaba en el Real Decreto-ley publicado a principios de abril, en el que recogía su primera tanda de medidas, que su intención en una segunda oleada de disposiciones es ajustar también la retribución que abona por la actividad de transporte. “Se procede también a revisar con carácter excepcional la retribución de la actividad de transporte impulsando a la par, una profunda reforma del procedimiento por el que se determina la retribución de esta actividad, con el fin de vincular la retribución a los activos en servicio no amortizados, eliminando bolsas de retribución no justificadas”, rezaba el documento. Moody’s deja claro que la reforma de Soria “puede ser negativa para REE”.

“Algunos de los rumores que han salido se llevan por delante el 25% del beneficio”, se admite sotto voce desde una eléctrica. Y es que las compañías temen que la reforma que prepara el ministro de Industria, José Manuel Soria, aseste un duro golpe a sus intereses y les condene a una calificación de 'bono basura', lo que remataría sus posibilidades de financiación. La cuestión no es baladí, en tanto las empresas acumulan una deuda superior a 68.000 millones de euros. “Nos jugamos mucho en los cambios que prepara el Ejecutivo. De hecho, la incertidumbre ya nos ha costado rebajas en los ratings. Y no parece que la cosa vaya a tocar tanto a las renovables, como las eléctricas tradicionales”, apuntan estas fuentes.

José Manuel Soria