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Ángel Ron no deja sitio al Banco Pastor en la renovada cúpula del Banco Popular
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ROBATTO Y RIVERA, PRIMEROS EJECUTIVOS

Ángel Ron no deja sitio al Banco Pastor en la renovada cúpula del Banco Popular

Banco Popular anunció ayer la composición del nuevo organigrama de su alta dirección. En pleno puente de Todos los Santos, la entidad presidida por Ángel Ron

Foto: Ángel Ron no deja sitio al Banco Pastor en la renovada cúpula del Banco Popular
Ángel Ron no deja sitio al Banco Pastor en la renovada cúpula del Banco Popular

Banco Popular anunció ayer la composición del nuevo organigrama de su alta dirección. En pleno puente de Todos los Santos, la entidad presidida por Ángel Ron quiso despejar dudas sobre el posible reparto de poderes con motivo de la compra del Banco Pastor. Con una estructura de poder concentrada en dos ejecutivos (Robatto y Rivera) y con una persona del presidente dentro del comité de dirección (Muñoz Fernández), el mensaje interno y también de puertas afuera ha sido interpretado de la misma manera: después de la fusión, seguirán mandando los populares.

Los cambios se producen menos de un mes después de adquirir al Banco Pastor, la primera gran operación entre entidades no rescatadas por el dinero del FROB. Antes de abordar el proceso de integración de ambas, Angel Ron ha retocado el organigrama de su casa. Lo ha hecho de manera muy sencilla, pero relevante. A partir de ahora, dos hombres, Jacobo González Robatto y Ángel Rivera, se convierten en los ejecutivos con más poder dentro del banco, uno más en la parte de gestión operativa de la compañía y otro más volcado en la del puro negocio de banca.

En el caso de Robatto, el exconsejero delegado de Barclays en España añade a su Dirección General Corporativa y Financiera las de Control-Auditoría y Recursos Técnicos. Por su parte, Rivera incorpora a su Dirección General de Negocio las divisiones de Comercial y de Banca Mayorista-Corporativa. Además, se ha creado una tercera gran dirección general, la de Riesgos, sobre la que depende Morosidad y el equipo especial creado para fusionar al Pastor, encomendado a José Ramón Alonso, antiguo director comercial que hizo la integración de las marcas territoriales del Popular.

Otro de los cambios relevantes tiene que ver con la entrada en el comité de dirección del banco a Alberto Muñoz, director de la Oficina de Presidencia, persona de máxima confianza de Angel Ron sobre el que recae la responsabilidad de Recursos Humanos, un área muy importante si se tiene en cuenta el proceso de fusión en marcha. De esta manera, Banco Popular concentra todo su poder en tres direcciones generales y delega en algunos ejecutivos varios servicios especiales de gran relevancia para que la integración del Banco Pastor se produzca con éxito lo antes posible.

A pesar de los cambios, Ron sigue ejerciendo como presidente ejecutivo y se resiste a crear la figura de un consejero delegado. Precisamente, este cargo en el Banco Pastor es ocupado por Jorge Gost (51 años), exresponsable de la red comercial del Banco Popular, donde trabajó 28 años, que con el nuevo organigrama ve reducidas las posibilidades de encontrar acomodo en un puesto equivalente al desempeñado en la entidad gallega. No en vano, fuentes próximas al ejecutivo barcelonés entienden que su continuidad en el nuevo proyecto es complicada y que lo más probable es negociar su salida.  

La cuota Pastor

Otra cuestión a resolver es la integración de la alta dirección del Banco Pastor en el Popular. A este respecto, es probable que algunos casos, como en la Dirección Comercial o en la de Medios, sus responsables, ambos en torno a los 60 años, sean prejubilados. En otros casos, como los de Susana Quintás (42), recién nombrada directora general una semana antes de la fusión, o el del director financiero Juan Badío (45), es probable que puedan encontrar acomodo en la jerarquía del Popular, aunque el nuevo organigrama diseñado por Ron deja claro que mandar, van a mandar sólo los populares.

De momento, el único puesto garantizado del Banco Pastor en la nueva entidad es en el consejo de administración. Su presidente, José María Arias, contará con un asiento en el máximo órgano de poder del Banco Popular. Lo tendrá a título personal, mientras que la Fundación Barrié, también presidida por el propio Arias y a su vez máxima accionista del banco gallego, contará con otro vocal en función del 7,8% que posee del fusionado. Quien también puede lograr un consejero es Pontegadea, es decir, Amancio Ortega, que por su 5% del Pastor pasará a tener cerca del 1% del nuevo banco.

Banco Popular anunció ayer la composición del nuevo organigrama de su alta dirección. En pleno puente de Todos los Santos, la entidad presidida por Ángel Ron quiso despejar dudas sobre el posible reparto de poderes con motivo de la compra del Banco Pastor. Con una estructura de poder concentrada en dos ejecutivos (Robatto y Rivera) y con una persona del presidente dentro del comité de dirección (Muñoz Fernández), el mensaje interno y también de puertas afuera ha sido interpretado de la misma manera: después de la fusión, seguirán mandando los populares.