Luis Suárez, el fiel escudero de las estrellas

Leo Messi acaparó todas las portadas después de su triplete ante el Manchester City en Champions, Neymar firmó este viernes por fin su renovación con el Barça hasta el 2021, y mientras, Luis Suárez invitó a toda la plantilla y el staff técnico a cenar para celebrar la Bota de Oro que había recibido por los 40 goles que marcó en Liga la temporada pasada. En cualquier otro equipo que no fuera el Barça de Messi, el uruguayo sería la estrella indiscutible, pero a Luis Suárez no solo no le importa, sino que asegura estar viviendo el momento más feliz de su vida. Ha asumido con total naturalidad un rol secundario, algo inaudito en una estrella. Y él lo es: un crack.

La Liga que consiguió el Barça la pasada temporada no se explica sin Suárez. Después del ruinoso mes de abril en el que el Real Madrid de Zidane se acercó peligrosamente en la tabla y el Atlético les eliminó en la Champions, Luis Suárez firmó 14 de los 24 goles de su equipo en las últimas cinco jornadas, las que suponían la cara o la cruz. Por primera vez en siete años, el Pichichi no fue para Cristiano Ronaldo ni para Leo Messi, lo que da medida del mérito, de la clase de delantero que es. Tras recibir la Bota de Oro, desveló que su hijo Benjamín le preguntó por qué no había marcado ningún gol "pero estaba contento porque el vecino lo había hecho". El ‘vecino’ es Messi y la relación personal entre ambos es una de las claves del buen funcionamiento del tridente.

Luis Suárez y Messi viven en la misma urbanización en Castelldefels. Benjamín, el hijo menor del uruguayo y Thiago, el mayor de Leo, van al mismo colegio y es habitual ver a los dos azulgranas juntos yendo a recoger a sus niños o llegando en el mismo automóvil a la Ciudad Deportiva de Sant Joan Despí. Sus esposas, Antonella y Sofía, también han hecho buenas migas y los cuatro salen juntos en muchas ocasiones a cenar e incluso coinciden en vacaciones. La compenetración es total dentro y fuera del terreno de juego y el Barça el mayor beneficiado. En Valencia, salvo sorpresa, el tridente volverá a estar listo de inicio. Y si Luis Enrique decide hacer algún cambio, Suárez ha sido ya el elegido en dos ocasiones y no ha torcido el gesto.

La delantera es la línea donde hay menos dudas, porque las bajas de Piqué y Jordi Alba, lesionados, y la duda sobre el estado de Sergi Roberto, que aunque tiene el alta médica no termina de encontrarse bien, deja en suspense la defensa azulgrana en Mestalla, donde Javier Mascherano podría volver a ocupar el lateral derecho. Luis Enrique ha dejado claro desde que empezó la temporada que no tiene reparos a la hora de hacer rotaciones, pero esta vez van a tener que ser obligadas ya que tanto Rafinha como Arda Turan se cayeron de la convocatoria a última hora lesión. El técnico solo cuenta con 17 jugadores del primer equipo y por eso tuvo que cambiar su habitual rutina y esta vez sí contar con Aleix Vidal.

Pese a que el Valencia "es un equipo algo desconocido", como reconoció este viernes el técnico asturiano, no se fía. La temporada pasada empataron en Mestalla, con gol de Luis Suárez, y en el maldito mes de abril el resultado fue de 1-2 para el conjunto che. El Barça se ha dejado ya ocho puntos en ocho jornadas, pero la contundente victoria ante el City y la vuelta del tridente tras la recuperación de Messi ha elevado la moral. Leo es el rey, el amo, pero Luis Suárez es mucho más que un fiel escudero. Las portadas se las suelen llevar Messi o Neymar, pero el pistolero es él.