Para el Madrid de Benítez, las segundas partes nunca fueron buenas

Parémonos a valorar un momento cómo se encuentra este Real Madrid objetivamente y veamos qué obtenemos de este análisis. Empecemos por lo primero que salta a la vista y por lo que, en realidad, de verdad importa en este deporte, las clasificaciones. En España, el Madrid es líder invicto de la Liga, empatado con el Fútbol Club Barcelona, pero se mantiene sobre él por el siguiente motivo que analizaremos a continuación, el bagaje de goles a favor y en contra. Saca, además, tres puntos al Celta, tercero, y cuatro a Atlético y Villarreal. En Champions, la situación es igual de favorecedora. Primero de grupo junto al PSG, pero por encima por el mismo motivo. Vamos, todo perfecto.

El segundo punto de este estudio, el 'goal average' general. El Madrid ha anotado 24 goles en Liga y ha recibido 4, es decir, tiene un +20 global, el mejor de los veinte clubes. El Barça, por ejemplo, tiene un +10. En la Champions, ha marcado 6 goles en tres partidos y no ha encajado ni uno solo, el PSG, ha hecho un tanto menos. Como tercer punto, el rendimiento individual. Keylor es el menos goleado y Cristiano es segundo en el Pichichi tras Neymar y empatado con Suárez. Vamos, todo ideal.

Pero hay algo que no encaja en este Madrid de Rafa Benítez. Es absolutamente incapaz de hacer un partido realmente completo. Ha juntado muchos minutos de buen fútbol, pero cada encuentro ha tenido otra fase cercana al desastre o al suplicio visual. No ha habido un solo día en que empezase jugando bien, sentenciase el partido y acabase dominando a su rival. Siempre se ha visto superado posicionalmente en alguna fase de todos los partidos, incluso contra el Betis en el 5-0 de la segunda jornada. Contra el Atleti le costó el empate, contra el resto sufrió para mantener la ventaja.

En esta situación tan positiva numéricamente hablando, lo único que puede hacer Benítez es seguir buscando la excelencia esa de la que hablaba Florentino hace década y media. Probablemente no la alcance porque no es lo que busca el de Parla: "En la tabla estoy donde quiero estar". Quiere resultados. Pero sabe que si siguen regalando muchos minutos al rival, lo van a pagar en más de una ocasión en el transcurso de la temporada.

"Mejoraremos con la competencia"

"Hemos hecho otra vez un buen primer tiempo. Creo que fue un inicio sensacional de partido y después, teniendo ventaja, nos relajamos inconscientemente. No pudimos marcar el cuarto y nos costó crear y controlar en la segunda parte. Todo lo bueno del primer tiempo nos faltó en el segundo", dijo el técnico madridista después de ganarle a Las Palmas con 45 minutos muy buenos y 45 minutos realmente duros de mirar. Pero "el equipo mejorará con la competencia". No estuvieron contra la UD Benzema, Ramos, Pepe (que sí estuvo convocado), Bale, Arbeloa, James, Keylor. Siete bajas que volverán próximamente. Es decir, este Madrid sólo puede ir a mejor.

Y eso que el gol vino en el primer tiempo. Es lo que tiene ir ganando cómodamente a un equipo inferior y al que se suponía que se ganaría fácil: exceso de confianza. "Encajar a balón parado te da rabia. Creo que nos ha faltado en concreto un poquito más de tensión en esa jugada". Tensión competitiva, básica en las jugadas de estrategia. Esa conclusión de la problemática en el tanto encajado exculpa directamente a Kiko Casilla, que rompió la racha de imabitilidad en el Bernabéu, pero su responsabilidad es nula en ese gol.