Kaká cede y este lunes habrá una cita clave en Madrid para cerrar su cesión al Milan

El irregular periplo de Ricardo Kaká en el Real Madrid puede tocar a su fin este lunes. Si no hay cambio de última hora, Adriano Galliani y Ernesto Bronzetti se reunirán en Madrid con Florentino Pérez para tratar de cerrar la cesión del brasileño por una temporada al Milan. El vicepresidente milanista y el representante del jugador ya saben que Kaká esta dispuesto a renunciar a parte de su ficha (10 millones de euros netos) para intentar dar luz verde a la operación, por lo que en el encuentro con Florentino buscarán un acuerdo para compartir el pago de la ficha. Ahí está ahora el nudo a deshacer para llegar a un desenlace satisfactorio para todos.

Así, todo parece indicar que el acuerdo llegará siempre y cuando Real Madrid y Milan se pongan de acuerdo en compartir el pago de la elevada ficha del futbolista. Una condición indispensable sobre todo para el conjunto italiano, que no atraviesa sus mejores momentos económicos. Prueba de ello ha sido la venta de Ibrahimovich, Thiago Silva y Cassano. En Milan no podían hacer frente a las fichas de tantas estrellas y han apostado por un cambio en la planificación de la plantilla. Buscan abaratar costes como sea, aunque quieren poner la guinda a su nuevo proyecto con el retorno de Kaká.

La clave de todo, de cualquier modo, está en el cambio de opinión del centrocampista brasileño. Hasta ahora el que fuera Balón de Oro no estaba dispuesto a ceder ni un euro de los 10 ‘kilos’ que ingresa por temporada –aún le restan tres con el Real Madrid- por lo que su fichaje por cualquier otro equipo era prácticamente inviable. Pero la medida de fuerza adoptada por Mourinho con el jugador sacándole de la convocatoria ante el Barcelona en la Supercopa y hoy frente al Getafe, ha sido el golpe definitivo. El mensaje que le ha hecho llegar José Mourinho, diga lo que diga en rueda de prensa, es nítido: no le quiere en la plantilla. De ahí que Kaká haya dado su consentimiento a renunciar a parte de su ficha por cambiar de aires. Y si es a Milán, mejor. Allí será recibido con los brazos abiertos. En Madrid ya no le quieren.