Rosberg gana y Alonso sube al podio en un GP de Gran Bretaña de locos

Nico Rosberg logró una victoria en el GP de Gran Bretaña difícil de resumir por la multitud de acontecimientos ocurridos: cuatro 'reventones', dos coches de seguridad y un abandono de Sebastian Vettel por un fallo en su caja de cambios. Muchas cosas debían pasar para que Fernando Alonso, que salía noveno, acabase en el podio. Y así fue, acompañó al alemán de Mercedes y a un Mark Webber -segundo- que tras una mala salida debió remontar desde el decimoquinto puesto. El Mundial, con el cero de Vettel, se ajusta un poco y deja al asturiano a 21 puntos del alemán.

Pirelli fue el perdedor del GP de Gran Bretaña. Su imagen, con cuatro pinchazos graves -Lewis Hamilton, Felipe Massa, Jean Eric Vergne y Sergio Pérez- (más otros leves, como el de Nico Hulkenberg) durante la prueba, ha quedado dañada. A la compañía italiana le mandaron fabricar un tipo de compuestos con una venda en los ojos (sin test para probarlos con vehículos de este año) y este está siendo el resultado. La F1 tiene lo que se le pidió, aunque con unos resultados no previstos.

El primer reventón vino del líder de la prueba, el 'poleman' Hamilton. A este pinchazo, y antes de llegar al primer tercio de la prueba, le siguieron los de Massa y Vergne, lo que provocó el primer coche de seguridad de la tarde para limpiar la pista y aclarar ideas. Hasta ese momento, La salida -limpia- había originado sorpresas como un retroceso de Webber y Alonso a la parte media del 'pelotón', y remontadas como la del brasileño de Ferrari, que partiendo duodécimo se llegó a poner quinto en los primeros giros. Vettel, tercero el sábado, adelantó en la salida a Rosberg (que partía segundo). Con la primera entrada a boxes y empujado por un F138 rápido (no tanto como en Montmeló o China), Alonso logró situarse cuarto muy pronto. Algo que parecía impensable. tras la primera curva de la carrera.

Abandono número 21 de Vettel en Fórmula 1

Vettel imponía un ritmo firme en ese primer puesto pero Rosberg, que le seguía cerca, no le permitía relajarse. Por detrás, Adrian Sutil, Kimi Raikkonen y Fernando Alonso soñaban con un podio. El asturiano, que estaba por delante del finés tras la primera parada, cambiaron posiciones con el segundo pitstop. Más trabajo para el asturiano y más cosas que debían suceder para salir contento de Silverstone. Y sucedieron.

En la vuelta 43 la caja de cambios del líder, Vettel, se rompió (el germano lleva 21 abandonos en la F1) y situaba a Rosberg primero. El Red Bull del alemán se paró en plena recta y hubo que sacar otro coche de seguridad para quitarle de la pista. Alonso, que marchaba quinto, entró en esos momentos a boxes, situándole en octavo puesto con el safety car. Cuando este se retiró quedaban siete vueltas y debió adelantar a los dos McLaren (debió esquivar por centímetros a Pérez cuando este reventó su segunda goma del fin de semana), un Force India, un Toro Rosso y al Lotus de Kimi Raikkonen para llegar hasta posiciones de podio. Detrás de él, como una lapa, remontaba también un Lewis Hamilton que llegó a situarse último al principio de la carrera como consecuencia de su pinchazo. Fantástico pilotaje para ambos pilotos. No fueron los únicos ya que merecen una mención especial también Webber (adelantó a una decena de coches,Alonso incluido, para llegar a ser segundo), Sutil (finalizó séptimo), Felipe Massa (sexto saliendo duodécimo), Daniel Ricciardo (octavo) y, por supuesto, Rosberg y Hamilton.

Silverstone destapó el sábado las carencias de Ferrari y el domingo puso sobre la mesa más conclusiones. Las más importantes: Mercedes ha mejorado (casualmente) desde su test privado con Pirelli y que el tema de los neumáticos hay que volverlo a tratar para no vivir una situación de tanta incertidumbre y con tanto peligro como la de este fin de semana.