Sergio Canamasas: "Los equipos venden un producto, ofrecen un servicio y el piloto paga"

Este 30 de abril cumplirá 25 años y reconoce que llegó “tarde en comparación a otros pilotos” al mundo de las carreras de coches. Sergio Canamasas -piloto en GP2 de Caterham Racing y desarrollador de Caterham F1 Team-, conoce sus puntos fuertes y, lo más importante, también los débiles. Es consciente de las cartas que puede jugar en esta partida un tanto aleatoria en la que se ha convertido la cantera del automovilismo. El sueño y el “objetivo, sí o sí, es llegar a la Fórmula 1”, a poder ser “el año que viene”.

Es sincero, no se esconde y es consciente de que su situación no es la habitual: “Sin tener el mejor palmarés” y con más edad de lo normal está en la antesala de la Fórmula 1. El barcelonés, único español en la categoría, explica a El Confidencial cómo ha logrado alcanzar una competición que otros con –teóricamente- mejor curriculum no han podido.

“Llegué tarde en comparación a otros pilotos. No es que sea un hándicap pero es algo que se tiene en cuenta porque no te da acceso a los mejores asientos. Los equipos fuertes firman siempre a finales de año y yo siempre he ido, por decirlo de alguna manera, a la ‘caza’. Quizás no he tenido nunca el mejor equipo y tampoco el mejor palmarés… pero estoy aquí” y ya ha completado los dos primeros grandes premios en Malasia y Bahrein.

De jugador de hockey hielo a piloto sobre asfalto

¿Y qué es lo que ha retrasado toda su carrera automovilística? Sergio se ríe antes de contestar. Quizás porque ahora lo ve como algo que pudo evitar fácilmente, o tal vez porque no es muy usual jugar al “hockey hielo y baloncesto… el deporte de motor siempre me había gustado pero los karts lo tenía como un ‘juego tonto’ para los fines de semana, hasta que a los 13 años, cuando tuve ‘uso de razón’, me di cuenta que era con lo que más disfrutaba. Me hubiera gustado tener un mejor desarrollo y mejores resultados en lugar de dar saltos tan rápidos de una categoría a otra”, admite el piloto de Caterham.

A nivel internacional, Canamasas corrió en 2009 en la European F3 Open (con el equipo de Emilio de Villota logró tres podios), los dos años siguientes en la World Series by Renault (también se subió en una ocasión al podio) y en 2012 disputó diez pruebas de la GP2 Series para repetir en esta campaña pero en todas las pruebas (22). Quién sabe si su edad, en lugar de suponer un problema, resultó algo positivo a la hora de comprender mejor el mecanismo que hace funcionar los entresijos de este deporte.

“Esto es como todo, ellos venden un producto, ofrecen un servicio y el piloto paga. Evidentemente no todo es dinero, el equipo ve el rendimiento en pista del piloto, sus características y termina eligiendo al que vaya más acorde con sus intereses. Para ascender, a no ser que un piloto disponga de grandes recursos, tenga un padrino de una multinacional con mucho dinero o un palmarés impecable, siempre se ha de estar en el lugar y momento adecuado, tener contactos, saber moverse bien…”. Este es un resumen de cómo suele funcionar el negocio de las cuatro ruedas, ruido de motor, y olor a goma quemada.

“Lo primero, el apoyo económico”

Sergio ha aprovechado bien sus bazas tanto dentro como fuera de la pista, demostrando que se puede destacar y progresar sin el mejor monoplaza. Así es como ha tocado la Fórmula 1, a la que pretende agarrarse en un futuro próximo. Dependerá, “lo primero, de un apoyo económico y lo segundo de desempeñar un buen papel en la pista. Sé que los recursos (económicos) se van agotando con lo que hay presión para hacerlo bien porque el objetivo, sí o sí, es la Fórmula 1”.

De momento, ya tiene argumentos como para decir que una pequeña parte de él ya está metida en F1, “ahora desempeño un papel de desarrollador y tester del equipo de Fórmula 1. Trabajo en test aerodinámicos y en el simulador. Mis esfuerzos están encaminados a GP2 pero cada vez que voy a la factoría, un par de días a la semana, trabajo entre 4 y 8 horas con los ingenieros de F1” para evolucionar el monoplaza que conducen Giedo Van der Garde y Charles Pic.

Las dos próximas carreras tendrán lugar en casa, en el GP de España del 11 y 12 de mayo. En Montmeló volverá a cruzarse con los pilotos de F1, siendo Fernando Alonso al que más respeta, y saludará a unos cuantos –“aunque hola y adiós, porque siempre vamos todos con prisa por el paddock”-. Tal vez, en el futuro, haya tiempo para charlar más tranquilamente… De momento, está concentrado en sumar sus primeros puntos del año, algo que espera lograr si no se repiten los problemas con neumáticos y comisarios que ha tenido en este inicio de temporada.