El estilo 'parlanchín' de Ferrari y su "gran" promesa china

"Se ha generado una expectación mediática desmesurada en torno a lo que traemos para el coche. El box de Red Bull o McLaren no está lleno de fotógrafos, como el nuestro, porque ellos no han hablado de este tema como nosotros, pero seguro que han traído igual o más cosas que nosotros para mejorar el coche". Sin definir si es bueno o malo, Fernando Alonso indicó el pasado viernes las consecuencias de 'cantar' a la prensa cada novedad que incorpora Ferrari a su monoplaza. El asturiano rebajó esa "expectación" generada explicando que sus rivales harían lo mismo, aunque no lo manifestasen públicamente. Este domingo, en esa línea de 'transparencia', Pat Fry adelantó que para Melbourne incorporarían algunas pequeñas novedades en el vehículo y que, de cara a China -dos carreras después-, instalarían un "gran paquete de evoluciones" en el F138. El director técnico de la Scuderia volvió a encender la bombilla de "expectación" que Alonso intentó apagar dos días antes.

Ferrari es un equipo especial. Es el que más seguidores tiene por todo el mundo, algo que conlleva una atención mediática que repercute en cada palabra salida de Maranello. Todo gesto comporta una consecuencia en la prensa y su posterior rebote de cara al público. Una misma acción o declaración tiene diferente resultado si lo expresa una persona ataviada de rojo con respecto a alguien de otro equipo. Esta fue la primera conclusión que sacó Pedro de la Rosa recién se enfundó la camiseta con el Cavallino Rampante. La discreción típica de otras escuderías aquí no tiene mucha cabida si a esta 'repercusión multiplicada' se le suma la facilidad para dar exclusivas.

 

Tanto la prensa como la afición agradece gestos como el de Fry de adelantar públicamente los planes de Ferrari durante las tres primeras carreras. El peligro, en este caso, reside en no mirar al resto de garajes. Utilizando las palabras de Alonso, seguramente los rivales lleven "igual o más cosas que nosotros para mejorar el coche". En realidad, Fry tampoco descubre nada nuevo porque, como cada temporada, todos los coches van evolucionando e incorporando elementos en sus coches a lo largo del año. La cuestión es saber quién lo hace con mayor efectividad. Otra cosa es que se diga que haya novedades y, como pasó en la recta final de 2012, Alonso tuviera que corregir a los suyos apuntando que llevaba con "el mismo coche seis carreras"...

En Red Bull, precavidos y con problemas con las gomas

Red Bull, en este sentido, son más reservados y precavidos. Pese a ser uno de los favoritos por cómo finalizaron el pasado Mundial, este domingo Sebastian Vettel admitió que "los dos últimos días" no habían sido "tan buenos como se esperaba" y que había sido el invierno "más complicado de los últimos años", algo inversamente proporcional a lo expresado por los de Maranello. En el sábado de Australia se conocerá la realidad, aunque los austriacos son famosos por no dar ninguna pista ni enseñar todas sus cartas hasta que comienza la partida.

Dejando a un lado lo que se pueda decir a los micrófonos y una vez que ha terminado la pretemporada, Ferrari dio la sensación sobre la pista de que cumplirá el primer objetivo que se había trazado para el estreno en Australia: estar en la Q3. Este domingo, Fernando Alonso realizó el mejor registro de los ocho días en Montmeló sin contar el de Nico Rosberg (lo hizo usando el DRS a discreción, algo permitido en la calificación de 2012 pero prohibido para este curso). Obviando la tabla de tiempos, el piloto español ya apuntó el viernes que había motivos para pensar en ello.

Fry, además de 'regalar' las novedades para Australia y China, habló del "shock" y la "sorpresa" que puede suponer para "unos pocos" la alta "degradación de los neumáticos". Quizás haya visto este problema en algún box ajeno o simplemente haya aireado una preocupación que, entre otros, parecen sufrir en Red Bull. Vettel admitió que le "es difícil hacer una lectura tras unos cambios de configuración y saber si es la dirección correcta porque los neumáticos, simplemente, no son lo suficientemente buenos". Nunca 'Pirelli' a gusto de todos...