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Dwyane Wade, la última esperanza de la china Li Ning para no caer en bancarrota
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UN MEGACONTRATO PARA TRATAR DE MEJORAR VENTAS

Dwyane Wade, la última esperanza de la china Li Ning para no caer en bancarrota

Li Ning fue una de las empresas con más repercusión en el baloncesto mundial, pero una caída de ventas la dejó en la cuerda floja. Ahora, Wade es su última esperanza

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Li Ning puede presumir de ser uno de los gimnastas más importantes de la historia de China. Sus seis medallas en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 le llevaron a convertirse en un ídolo de su país, un 'tirón' que supo aprovechar de la manera más inteligente: retirado sólo cuatro años después, en 1990 decidió que había llegado el momento de emprender, creando una marca de ropa deportiva con su mismo nombre. Desde ese mismo momento, su empresa se convirtió en una referencia mundial, pero sus últimos tres años han sido desastrosos. Tanto, que sólo un hombre puede salvarla: Dwyane Wade.

El escolta de los Miami Heat se ha convertido en el gran reclamo publicitario de la marca, un hombre en el que Li Ning ha puesto todas las esperanzas para reflotar una empresa que vive momentos muy complicados. Con graves problemas económicos, la compañía puso hace un par de añostoda la carne en el asador para patrocinar al norteamericano, con el objetivo de mejorar sus números. Con una gravecaída de ventas en los últimos años, Wade es la última esperanza de una empresa que se encuentra al borde de laquiebra técnica y que hace no mucho llegó a luchar con las grandes multinacionales.

A razón de 90 millones de euros, distribuidos en 10 años, Li Ning se hacía con los servicios de Wade en 2013. Ahora, en el momento tan complicado que vive la compañía china, el norteamericano se ha convertido en una de las pocas tablas de salvación a las que la marca deportiva se puede agarrar. Dwyane Wade es el último bastión de una empresa que nació para ganarse un hueco en China y que llegó a competir al mismo nivelcon empresas como Nike o Adidas. De la venta de sus productoren los próximos años, publicitados por Wade, puede depender el futuro de Li Ning.

Vinculada tradicionalmente al mundodel baloncesto, Li Ning se dio a conocer popularmente en España después de la vestimenta que diseñó para la selección española en los Juegos de Pekín 2008.Desde su fundación en 1990, la empresa china siempre fue en crecimiento, convirtiéndose en una referencia dentro de su país gracias a la venta de zapatillas, que contaba con varios conceptos sencillos: siempre de color rojo y blanco, su calzadoevitaba los tonosllamativos, además de contarcon el lema 'Todo es posible', que se convirtió en una referencia en China.

Poco a poco, las ventas de la marca comenzaron a crecer, haciéndose un nombre en el mercado asiático y yendo más allá de las zapatillas de baloncesto que tanto éxito le habían dado, extrapolando su éxito a otras prendas y deportes. El crecimiento era exponencial y, poco a poco, comenzó a hacerse un hueco en los mercados europeos, donde empezó a calar hondo. Pero su gran salto cualitativo llegó en 2008, conmotivo de los Juegos Olímpicos de Pekín: una competición en la que el propio Li Ning encendió el pebetero iba a ser su despegue definitivo.

La empresa china consiguió el patrocinio de varias de las selecciones más potentes del viejo continnte, como el fue el caso de España o de Rusia, además de deportistas de primerísimo nivel como la pertiguista Yelena Isinbayeva, Asafa Powell o Ivan Ljubicic. El escaparate olímpico hizo el resto para dar lugar a un crecimiento brutal de Li Ning, que al término del año sumaba récord de ganancias netas, consiguiendo 10,4 millones de euros. A partir de 2008, los números de la marca china fueron impresionantes: en 2009 logró 11,4 millones de beneficio neto, logrando su récord en 2010 con 13,4 'kilos'.

Curiosamente, ese año fue la marca que vistió, entre otros, el Espanyol y, un año después,el Sevilla.Pero, entonces, algo cambio. Después de más de dos décadas consiguiendo grandes réditos económicos, en 2011 los beneficios netos se redujeron a 4,7 millones de euros para, un año después, cambiar la marca para siempre: el gigante chino cerraba el año con unas pérdidas de netas de 27,1 millones, lo que provocó que se viera obligada a declararse en concurso de acreedores. A partir de ese momentos, los números rojos han sido una tónica: 5,4 millones de pérdidas en 2013 y 12,2 en 2014.

Los expertos creen que la caída de Li Ning tuvo que ver con su afán expansionista: cambiar las señas de identidad que tan reconocible la habían hecho, incluso para intentar superar aNike o Adidas, provocó su caída. Olvidar el tradicional blanco y rojo para diseñar zapatillas de colores inexplicables y modificar el logo por 'Hacer el cambio' dieron lugar a una monumental caída de las ventas. Ahora, tras la entrada en corurso de acreedores, la empresa china se ha visto obligada a volver a centrarse en el baloncesto, el deporte que tan reconocida la hizo, de la mano de Dwyane Wade.

El escolta norteamericano fue el elegido para tratar de levantar el imperio de Li Ning. Siobhan Zheng, el portavoz de la empresa, dio a conocer por qué la empresa cree tanto en él: "Wade ha llegado donde está por su trabajo duro, no por ser el más alto ni el más guapo". Uno de los jugadores de la NBA más seguidos en China tiene en sus manos el futuro de la empresa: de lo que sea capaz de ofrecer en la pista puede depender el número de ventas de Li Ning, una compañía que había llegado a competir con las grandes marcas mundiales, pero a la que los cambios de identidad no le sentaron nada bien.

Li Ning puede presumir de ser uno de los gimnastas más importantes de la historia de China. Sus seis medallas en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984 le llevaron a convertirse en un ídolo de su país, un 'tirón' que supo aprovechar de la manera más inteligente: retirado sólo cuatro años después, en 1990 decidió que había llegado el momento de emprender, creando una marca de ropa deportiva con su mismo nombre. Desde ese mismo momento, su empresa se convirtió en una referencia mundial, pero sus últimos tres años han sido desastrosos. Tanto, que sólo un hombre puede salvarla: Dwyane Wade.

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