Cuesta abajo y sin frenos: los visados para nuevas viviendas se hunden un 37% hasta febrero

No existe suelo. Los visados solicitados para proceder a la construcción de nuevas viviendas han comenzado los primeros compases de 2012 como terminaron el ejercicio anterior: sin visos de recuperación alguna. La caída acumulada hasta el mes de febrero asciende a un 37,3% en relación al mismo periodo de 2010, con 9.371 unidades, según datos del Ministerio de Fomento.

Sólo durante el mes de febrero, el número de visados de obra nueva se situó en 4.600 unidades, lo que supone un descenso interanual del 43,8%. Los datos son todavía más preocupantes si se tiene en cuenta el ritmo actual, que apenas superaría los 56.000 visados al cierre del año, con una caída del 22,8% respecto a 2011, año en el que ya se marcó mínimo histórico.

El abismo respecto a hace poco más de seis años muestra dos escenarios totalmente diferenciados. En los ejercicios de 2005 y 2006 los máximos registrados ascendieron a 729.652 y 865.561 nuevas casas visadas en pleno 'boom' del sector.

Por tipología, los visados que más cayeron hasta febrero fueron los destinados a construir viviendas en bloque (-42,5%), con 6.749 unidades, aunque siguieron suponiendo el 72% del total, mientras que aquellos para viviendas unifamiliares, descendieron un 18,7%, hasta los 2.615 visados.

Por otro lado, los visados destinados a la reforma y restauración de viviendas descendieron un 7,2%, hasta las 3.916 unidades, en línea con los últimos meses.

El Gobierno prevé una larga sequía

Los visados de obra nueva permiten conocer cuáles serán los ritmos de construcción de los próximos años y, a la vista de las cifras, es de esperar que la iniciación de viviendas no levante cabeza en el medio plazo.

Así lo espera el Gobierno, que en el Plan de Estabilidad 2012-2015, remitido esta semana a la Comisión Europea, recuerda que la demanda de viviendas ha experimentado caídas "muy acusadas" en 2011, por lo que es previsible "un ajuste lento del mercado".

Concretamente, prevé que las viviendas iniciadas se reactiven "muy suavemente", sólo compensando la reducción del 'stock' de inmuebles sin vender, y que en 2015 este ritmo ronde los 105.000 inmuebles anuales, tan sólo 15.000 más que en 2011.

El Gobierno valora que ello permita, al menos, "leves tasas" de crecimiento interanuales positivas en los indicadores de inversión inmobiliaria residencial durante 2014 y 2015.