Es noticia
El calvario inmobiliario durará dos años más: las ventas caerán otro 20% y los precios, un 15%
  1. Vivienda
PREVISIONES DE BBVA HASTA 2013

El calvario inmobiliario durará dos años más: las ventas caerán otro 20% y los precios, un 15%

Al mercado inmobiliario español todavía le quedan varios años más de travesía por el desierto. A corto plazo (2012-2013) el BBVA asegura que las ventas de

Foto: El calvario inmobiliario durará dos años más: las ventas caerán otro 20% y los precios, un 15%
El calvario inmobiliario durará dos años más: las ventas caerán otro 20% y los precios, un 15%

Al mercado inmobiliario español todavía le quedan varios años más de travesía por el desierto. A corto plazo (2012-2013) el BBVA asegura que las ventas de viviendas continuarán resintiéndose, con caídas en torno al 20% -en línea con los últimos porcentajes-, mientras que los precios mantendrán su ajuste. En términos nominales, la caída puede estar en el entorno del 15%.

Estos son los negros nubarrones que dibujaba ayer sobre el ‘ladrillo’ español Ignacio San Martín, director de Research de BBVA Real Estate en unas jornadas sobre la Gestión de Activos Inmobiliarios de las Entidades Financieras organizado por Unidad Editorial. "No sé si los precios caerán un 13%, un 15% o un 17%, pero lo cierto es que la caída se va a acelerar. El fondo, de momento, no lo he visto".

San Martín, que recalcó que tanto la situación económica de España por la que atraviesa España como la debilidad del sector inmobiliario son cíclicos, ha reconocido que el panorama a corto plazo que dibuja la entidad sigue siendo bastante negativo por diversos factores como el fuerte desempleo –entre 800.000 y 900.000 personas se sumarán a las listas del paro- o el aumento de la presión fiscal. Dos factores que tendrán un efecto negativo tanto sobre los ingresos de las familias como los de las empresas, lo que provocará que se mantenga el proceso de desapalancamiento de los últimos años. "En este entorno y cuando las expectativas apuntan hacia descensos adicionales en los precios, las familias españolas no compran pisos".  

Declaraciones pesimistas que contrastaron, sin embargo, con las de otro compañero de profesión, Carlos Bode, director del negocio inmobiliario del Banco Sabadell, quien, en su opinión nos encontramos cerca del fin del ajuste de cantidades y precios. "La demanda de viviendas existe. Puede ser débil, pero existe". En su opinión, se "ha hecho mucho ruido que no nos ayuda a generar confianza", en alusión a las noticias de los medios de comunicación en torno a la situación actual del mercado inmobiliario. "Necesitamos generar confianza y decir las noticias positivas que no decimos".

A medio y largo plazo (2015-2020) Ignacio San Martín se mostró más positivo. “La situación actual es cíclica. El mercado inmobiliario se recuperará tarde o temprano. España tiene un potencial de crecimiento del 2,5% y del 2% respecto a la generación de empleo, mientras que la renta de los hogares puede crecer en términos nominales un 3%”. No obstante, se refirió a la necesidad de reorganizar un negocio, el inmobiliario que permita evitar los errores el pasado.

La unidad inmobiliaria del BBVA -BBVA Real Estate- se puso en marcha a finales de 2011 para optimizar el negocio inmobiliario del banco tanto a corto como a medio plazo. Su objetivo, a diferencia de otras grandes entidades -véase el ejemplo del Santander en Seseña- no es una venta rápida de activos con pérdidas, sino que su estrategia, según explicó San Martín, se basa en desarrollar una estrategia de venta paulatina de activos con ganancias.

Integra todos los activos vinculados al negocio inmobiliario -30.000 millones de euros-. Agrupa tanto el negocio promotor como patrimonialista, gestiona el conjunto de los inmuebles adjudicados, al tiempo que concentra las participaciones de BBVA en empresas inmobiliarias. A medio plazo, el objetivo es dar salida al 80% de dichos activos. 

Para Andrew Shirley, editorde The Wealth Report señala que el informe de este año "contiene incluso todavía más pruebas de que los ricos del mundo están capeandola ralentización económica mejor que el grueso de la población, y donde mejorse puede apreciar esta coyuntura es en los mercados inmobiliarios prime. Esos mercados están consideradoscomo “paraísos seguros” que siguen atrayendo a aquellos inversores privados quebuscan, tanto inmuebles residenciales prime,como inmuebles comerciales. La incertidumbre política y económica reinante enel mundo únicamente está contribuyendo a exacerbar la tendencia.”

“Pero no sólo es en los mercados inmobiliarios donde están dejando suhuella laspersonas con alto poder adquisitivoprocedentes de las economías en rápido crecimiento. La Encuesta de actitudes del Informe sobre la riqueza revela queéstas juegan un papel cada vez más importante en el mundo del deporte, de lasbellas artes, vinícola y de la filantropía.”

Por su parte, Luigi Pigorini, consejero delegadode Citi Private Bank Europa, Oriente Medio y África señala que “la naturaleza de las personas y familias pudientes, especialmente aquellas que proceden de Europa, Oriente Medio, África y Asia, se ha tornado extraordinariamente global. Muchos buscan el estado de derecho y la estabilidad que hacen, del Reino Unido, uno de los principales destinos de elección para la inversión. Siendo el inglés un idioma que para muchos es segunda lengua y conuna libra esterlina relativamente débil, las personas pudientes del mundo han centrado su interés con seguridad en Londres y en la conservación de la riqueza que esta ciudad permite.”

Y añade que “los inversores que buscan una estrategia más conservadora tienden mucho más hacia inmuebles de alta calidad en ciudades tales como Pekín, Londres, Múnich, Nueva York, París y Sídney. A la inversa, para aquellos que están dispuestos a afrontar un mayor riesgo, mercados con un alto índice de crecimiento, tales como Asia y Latinoamérica, pueden ser capaces de generar unos retornos más atractivos que Estados Unidos y Europa. Los inversores deben seguir siendo cautelosos dado que el crecimiento global económico continuará afectando a todos los mercados inmobiliarios, y deberán medir sus expectativas en cuanto a rentabilidades y retornos, teniendo en cuenta el crecimiento.”

Al mercado inmobiliario español todavía le quedan varios años más de travesía por el desierto. A corto plazo (2012-2013) el BBVA asegura que las ventas de viviendas continuarán resintiéndose, con caídas en torno al 20% -en línea con los últimos porcentajes-, mientras que los precios mantendrán su ajuste. En términos nominales, la caída puede estar en el entorno del 15%.