Promotores inmobiliarios españoles apuestan por el mercado portugués

El mercado inmobiliario portugués y español están en ciclos contrarios y, aunque el luso es más pequeño, España tiene mucho que aprender de ellos, consideraron un grupo de promotores españoles que apostaron por Portugal y que estarán presentes en el Salón Inmobiliario de Lisboa el próximo noviembre. Los mercados de España y Portugal "no son comparables, están en ciclos contrarios y su tamaño es diferente, mientras en España los precios suben una media de un 15% anual, aquí lo hacen un 5%", consideró Carlos Cercadillo responsable de Hercesa en Portugal, a donde llegaron por primera vez este año, dentro de la lógica de la expansión ibérica, con una inversión de entre 350 y 400 millones de euros para construir 1.800 viviendas en los alrededores de Lisboa.

Sin embargo, Cercadillo coincidió con Miguel Amo, consejero delegado del grupo Lar en Portugal, en que hay muchas cosas que aprender del mercado portugués, que, siendo un mercado más pequeño, el precio del suelo es más barato, las casas son mayores (un 30% más cada habitación) y la calidad de la construcción es mucho mejor.

El grupo Lar aterrizó en Portugal por primera vez en 2001 y desde entonces trabaja exclusivamente en la construcción de primeras viviendas en Lisboa, donde ya han entregado 250 y tienen 500 en marcha. Amo explicó que la estrategia del grupo siempre fue la diversidad geográfica y optaron por el mercado portugués porque tenía una cultura similar y un tamaño significativo.

Lo mismo ocurrió con Realia, explicó el responsable del grupo español en Portugal, Paulo Rei Tavares, que llegó hace dos años dentro de una estrategia de crecimiento ibérico y desde entonces han invertido 30 millones de euros en dos proyectos de viviendas destinadas a la clase media alta y clase alta, una en Coimbra, en asociación con el grupo Amorín, y la otra en una céntrica calle lisboeta.

Los tres responsables coincidieron en señalar que el mercado de los dos países es similar, la cultura de la vivienda en propiedad, y en los dos países surge un nuevo tipo de compradores, los inmigrantes, que han salvado al sector del problema de una población cada vez más envejecida.

Todos coinciden en que el crecimiento del mercado español no existe en Portugal, "pero lo normal es lo que pasa aquí, un crecimiento moderado, no lo que ocurre en España, eso es excepcional". Sin embargo en estos momentos el mercado portugués en este sector no pasa por un momento demasiado bueno, "nadie sabe la tendencia que seguirá el mercado pero creemos que estamos al final de un ciclo y que debe revitalizarse, aunque no se pueden poner fechas", explicó Miguel Amo. "Pero es un buen momento para hacer una buena reserva para los próximos años", apostilló Cercadillo.

"Nadie puede esperar aquí la rentabilidad nominal de España, allí es muy superior, pero también es impensable que se siga teniendo esa rentabilidad por tiempo indefinido", dijo Amo, sin embargo el ritmo mensual de ventas es muy cercano al de España. Además una de las ventajas de Portugal es que el coste del suelo supone entre un 35 y un 40% sobre el precio final de una casa, mientras que en España representa entre el 50 y el 60%.

Muestra del interés de los promotores españoles en el mercado portugués es su presencia en la VIII edición del Salón Inmobiliario de Lisboa, entre el 3 y el 6 de noviembre, que se a quintuplicado respecto al año pasado y son el país con más metros cuadrados de exposición, 1.200. Las previsiones de la organización es que visiten la feria unas 25.000 personas.