Comienzan los primeros celos de Jesús por la relación entre Andrés y Begoña en 'Sueños de libertad'

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No podrían encontrarse ya en lugares tan opuestos de la vida, pero parece que las llamas vividas entre Begoña y Andrés en la serie Sueños de libertad, todavía mantienen sus brasas candentes. La confidencialidad que llegaron a tener los cuñados de la producción de las tardes de Antena 3 no ha pasado desapercibida para el empresario de la fábrica De la Reina. En el episodio de este lunes, Jesús por fin ha entendido que entre su esposa y su hermano podría haber algo más que una simple cordialidad.

El capítulo ha comenzado con la visita de Begoña y Luz a la antigua institución donde residía la tía Eugenia. Allí se han encontrado con Sor Remigia, la monja que estaba antes al cuidado del familiar de la enfermera. Aunque la eclesiástica se ha mostrado negada a hacer memoria, finalmente ha admitido que cuando Eugenia llegó a ingresar, lo hizo después de haber dado a luz. Eso sí, ha acentuado la monja, la mujer llegó sin el bebé.

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En el dispensario, Begoña ha pensado que Remigia les daría más respuestas, pero Luz ha opinado que había dado demasiadas. La esposa de Jesús ha dicho que estaba confundida. ¿Y si el hecho de que le arrebatasen a su bebé fue lo que la trastornó? "Tengo que poner paz en su tormento", ha reflexionado la chica. Luz, por su parte, le ha asegurado a su amiga que llegarían juntas hasta el final de aquella incógnita, y que ella se encargaría de consultar a los orfanatos de la zona.

¿Mala suerte para la novia?

En cada de los De la Reina, María estaba probando su vestido de novia, cuando Andrés ha entrado en la habitación. La futura novia se ha asustado ante la despreocupación del chico por verla antes del altar, enfundada en su vestido. ¿Será este un mal presagio para su matrimonio? María le ha obligado a que se diese la vuelta y, a espaldas, Andrés ha explicado lo emocionado que estaba por la incipiente boda.

Jesús ha reprochado a Andrés que se hubiese ocupado de asuntos que no le concernían

María ha respirado aliviada, pues ha reconocido que se asustó mucho cuando vio a su novio tan ausente. "Después de la muerte de mi padre, tú eras mi único sostén", ha confesado la joven. Andrés ha contado que tanto el capitán Duque como su madre estaría muy presentes en la boda, de una forma u otra. Esto ha despertado las lágrimas de la futura esposa, que no eran de tristeza, sino de suma felicidad al ver la predisposición del ex soldado.

Jesús, el último en enterarse

Por su parte, Begoña ha acudido al despacho de Jesús para dejar unas facturas del dispensario, y su marido le ha frenado los pies. El empresario le ha preguntado por qué se había marchado tan pronto por la mañana, y Begoña ha mentido, diciendo que tenía papeleo acumulado por llevar a cabo.

El jefe de la fábrica ha valorado lo mucho que Begoña ayudaba a otra gente trabajando para la doctora, al igual que se preocupaba por el bienestar de su tía. Ahora que supuestamente no había secretos entre ellos, Jesús se ha ofrecido para pagar las mensualidades de la residencia de Eugenia, pero Begoña le ha dicho que ya había hecho suficiente con su sensibilidad, y que se las apañaba con el dinero que le iba pasando y su sueldo del trabajo.

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"Me hace ilusión que compartamos este secreto", ha pronunciado Jesús, quien ha encontrado su punto romántico al ocultamiento sobre Eugenia. Sin embargo, su ilusión se ha hundido en menos de dos minutos, cuando, a solas, ha llamado a Los Cerros para encargarse de las próximas mensualidades. Desde la institución le han comentado que ya estaban pagadas, y el marido, intrigado, ha preguntado quién se había ocupado de ellas.

Acto seguido, Jesús ha acudido para hablar con Andrés, o más bien discutir con él. "Sabes que hay limites que no se pueden traspasar, ¿verdad?", ha comenzado el hermano mayor. Jesús le ha reprochado al ex militar que se hubiese ocupado de la factura del sanatorio. Andrés, por su lado, ha contestado que forzó a Begoña para que le contase qué le ocurría, al verla tan apurada. "Pregúntate por qué no te lo ha contado a ti antes", ha apuntado Andrés, dejando caer que tan buen marido no sería cuando su esposa no confiaba en él.

Jesús ha arremetido contra Andrés, vociferando que se ocupase de sus asuntos, especialmente cuando su prometida casi le dejaba tirado hacía un par de semanas. Andrés le ha gritado que no metiese a María en todo aquello, pero ya era tarde. María les ha escuchado, y ha acudido a su encuentro. ¿Se sincerará Andrés a su novia sobre el favor que le hizo a Begoña?