Lydia Bosch no hace autocrítica ante la cancelación de 'Mía es la venganza' y culpa a Telecinco

Mía es la venganza, la gran apuesta de ficción diaria de Mediaset España para Telecinco, no ha conseguido el apoyo esperado por la audiencia y ha sido cancelada. Tras un mes de emisión, la serie, que tiene más de 80 episodios pendientes por emitir, pasa desde el lunes 17 a Divinity, dejando su hueco en la cadena principal a Así es la vida, el programa que presentan Sandra Barneda y César Muñoz en sustitución de Sálvame.

Parte del equipo de la historia para televisión está mostrando su decepción en sus cuentas oficiales en redes sociales, algo que también ha hecho Lydia Bosch, la protagonista. Pero la actriz, lejos de asumir que Mía es la venganza no es el producto esperado, que no está gustando y hacer de alguna forma autocrítica, sigue defendiendo que es una grandísima serie: "Os merecéis alguna explicación, quizás no todas las que me gustaría daros, porque hay cosas que no podemos llegar a entender. Pero bueno, a veces... yo qué sé, hay razones económicas porque esta era una serie muy cara, pero no vamos a entrar en esto porque ha pasado lo que ha pasado y es que la grabación de la serie la hemos parado en el capítulo 110", comenzaba diciendo.

"Los seguidores de Mía es la venganza lo sabéis. Los capítulos terminan en alto y las historias ahora ya habían tomado una velocidad de crucero brutal que iban para arriba y había tramas muy interesantes. Muchas de ellas las vais a ver... Se ha hecho un final muy digno para que no os quedéis con la miel en la boca. Acabo de enterarme también que se va a emitir ya a partir del lunes en Divinity, que es un canal que todos tenemos en casa. Lo buscamos y ahí podemos seguir viéndonos", añade sobre el momento actual del proyecto.

TE PUEDE INTERESAR

El director de 'Mía es la venganza', contra la "última puñalada" de Telecinco a su serie

Nayín Costas

Bosch no se corta y señala directamente a Telecinco por no haberles dado el tiempo que ella cree que necesitaban para ser un éxito: "Todos estamos orgullosísimo de haber formado parte de este 'serión', porque lo dije cuando me hicieron las primeras entrevistas y lo sigo diciendo y manteniendo. Dije que esta era una serie buenísima y que si se le daba tiempo y con el boca a boca... era un niño que necesitaba crecer y que con tiempo sería una serie que gustaría a todos los telespectadores. El tiempo no lo hemos tenido".

Asegura que su argumento es secundado por las personas que siguen viendo la serie, que este jueves, según los datos de audiencia, eran una media de 738.000 personas. Señala que ellos sí saben valorar el poder de las tramas. Asimismo, deja la puerta abierta a que suceda un giro inesperado y el final que han grabado no se emita, lo que significaría que retoman las grabaciones y siguen con la idea inicial de hacer tres temporadas de 90 episodios cada una.