Alonso Caparrós, a corazón abierto en 'Espejo público' sobre un delicado asunto familiar: "Estuvo un año sin hablarme"

Este viernes, 9 de febrero, la sección de crónica social de Espejo público ha estado dedicada, en parte, a uno de los colaboradores del programa de Antena 3, Alonso Caparros. Hace unos días, el comunicador pasó por el podcast de su compañera Pilar Vidal, Drama Queen, el que se sinceró sobre las adicciones que le atormentaron durante décadas y la complicada relación que llegó a mantener con uno de sus hijos.

Tras revisar algunos fragmentos de su charla con Vidal, Caparrós ha reconocido que, en esta etapa, está "feliz" con su vida. Sobre todo, por la buena sintonía que tiene ahora con su hijo, especialmente, con Andrés: "Me ha costado mucho estar sin hablarme con él". El tertuliano de Atresmedia ha señalado que entre ambos hubo "un año y medio de silencio total", "lo peor que le puede pasar a un padre".

"¿Te puedo preguntar por qué?", se interesaba Susanna Griso, y su compañero accedía a contarlo sin complejos: "Cuando cumplió la mayoría de edad, cuando se hizo mayor, tenía pendiente hacerme todos los reproches y expresarme todo el enfado que puede tener un chaval cuando su padre ha estado más que ausente. Hubo un momento en el que yo fui a aconsejarle una cosa y él me dijo: '¿Quién eres tú, si nunca has estado en mi vida?'".

"Fue doloroso y triste. Poco a poco, se iba acostumbrando a no necesitarme. Cada vez me daba más cuenta de que no me necesitaba. Eso me estaba matando", ha lamentado Alonso, cuya situación familiar, afortunadamente, ha mejorado. El que fue rostro de Sálvame (Telecinco) también ha explicado cómo fue esa reconciliación.

"La reconciliación con mi hijo, que además ha sido un acto de generosidad y bondad. Mi miedo era que no me entendiera, que no me perdonara. Y no solo me ha perdonado, sino que le ha salido solo, ha salido de él. Estaba esperando a que volviese su padre", ha agradecido Caparrós.

"Por primera vez, tengo a mis hijos y siento que estoy haciendo por ellos lo que no podía hacer. Tengo un trabajo que me encanta. Me siento muy afortunado", ha aceptado Alonso, que instantes más tarde recordaba con amargura otro episodio de la infancia de sus hijos: "Me los llevaba a jugar a la playa y me alejaba de ellos porque me avergonzaba de mí mismo".