Chari Lojo, ex 'GH' y ahora funcionaria de prisiones en Ibiza, destroza a Belén Esteban

Son muchos los personajes que a lo largo de los años se hicieron populares gracias a su paso por la casa de 'Gran Hermano'. Es el caso de Chari Lojo, que llegó a vivir en Guadalix de la Sierra hasta en tres ocasiones. La primera fue en 'GH 12', luego en 'El reencuentro' y finalmente en 'GH VIP 3', donde coincidió con Belén Esteban.

"Belén se cree que está por encima del resto"

Ahora, la joven, funcionaria de prisiones en Ibiza, ha concedido una entrevista a la web de Telecinco Outdoor, hablando de todo un poco. Entre sus declaraciones, las que más llaman la atención son las relacionadas con la colaboradora estrella de 'Sálvame': "Vivir con ella fue una tortura. No conozco persona más egocéntrica. Belén está acostumbrada a tener todo lo que quiere, a ser la protagonista allá por donde va y a que nadie le diga absolutamente nada. Se cree que está por encima del resto y que su opinión es la que impera. Y yo no iba a hacer lo que ella quisiera. Estaba claro que mi presencia no le iba a gustar".

Chari cree que su victoria fue completamente injusta: "En 'Gran Hermano' debería premiarse la convivencia y el compañerismo y, en eso, no ganaba ni por asomo. Además, ella quiso abandonar casi desde la primera gala y eso no es vivir la experiencia con ganas. Ahora, el público valora otras cosas. Los valores de un verdadero ganador distan mucho de sus actitudes. Pero tampoco nos cogió por sorpresa, ya que ganó '¡Más que baile!' y menos ritmo no podía tener. De todos modos, creo que no es mala persona y cuando hemos coincidido después de 'GH VIP' hemos tenido un trato cordial".

De rechazar 'Tentaciones' a ser funcionaria

Felizmente en pareja, con cuya persona también comparte profesión, asegura que ha rechazado en todos estos años el trono de 'Mujeres y hombres y viceversa' e ir a 'La isla de las tentaciones' con su novio, pero sí deja claro que se atrevería a la aventura de 'Supervivientes'.

Entre otras declaraciones, Lojo sorprende con un episodio que vivió en su trabajo: "Yo realizaba uno de los puestos más importantes. Me dedicaba a controlar por cámaras a los funcionarios y a los reclusos. También era la que abría y cerraba las puertas. Por tanto, era la que tenía que dar la voz de alarma a la más mínima actuación en la que alguien corriera peligro".

"Un módulo entero se rebeló contra Agustín, mi novio, tirándole objetos y casi llegan a realizar un motín. En las prisiones hay módulos de convivencia, pero también hay módulos de aislamiento, de nocivos y estos son arena de otro costal. Se afrontan situaciones de mucho riesgo. Finalmente, todo se solucionó, pero fueron momentos de mucha tensión y miedo", confiesa tras asegurar que está encantada con su trabajo.