'Tentaciones': Manuel, destrozado tras recibir por sorpresa las joyas de Lucía

Fue uno de los momentos cumbre de la hoguera de las chicas en la última entrega de 'La isla de las tentaciones 3'. Lucía, al ver a su chico, Manuel, siendo infiel por partida doble con Stefany y Fiama, pidió a Sandra Barneda dejar de ver estas hirientes imágenes y decidió desprenderse de dos pulseras, un anillo y un collar que le había regalado su novio.

"Yo no quiero nada que tenga que ver con esta mierda de persona", dijo la gaditana mientras se acercaba muy decidida al fuego y arrojaba las joyas. Este lunes 15 de febrero, en 'El debate de las tentaciones', Barneda ha mostrado durante gran parte del programa una cajita en la que finalmente se ha descubierto que estaban los abalorios de la concursante, rescatados de la hoguera.

Manuel, destrozado: "Ella es la única que me ha hecho sentir diferente"

Ha sido la excusa del programa de Telecinco para dar paso a la secuencia en la que la presentadora acude a Villa Playa y enseña a Manuel la caja con las joyas de su pareja. Al ver su contenido, el 'influencer' se ha derrumbado por completo y ha comenzado a entender la situación.

"El collar tiene un ritmo cardíaco y un corazón porque ella es la única que me ha hecho sentir diferente", ha confesado Manuel, señalando su tatuaje del brazo con el mismo dibujo. Así, el de Puerto Real ha expresado que está prácticamente convencido de que su relación con Lucía está rota: "Me he comportado de una manera que no siento. Yo tengo sentimientos por Lucía y me siento fatal, porque he notado que nuestros caminos se separan y esto está llegando a su fin".

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"No puedo decirte lo que ha ocurrido, pero Lucía me ha pedido que te devuelva estos objetos", le ha informado Sandra, aunque él ha mantenido que no piensa tirar las joyas: "Me las voy a quedar para siempre. Han formado parte de una etapa de mi vida muy bonita y no me voy a desprender de ellos".

Después de que Sandra Barneda se marchase, ya algo más calmado, Manuel ha comentado lo sucedido con Fiama: "Por un lado me siento mal porque sé que con mi actitud aquí ella ha hecho algo por venganza, pero, por otro, me siento bien porque he hecho lo que he querido". Además, ha intuido que las imágenes que "han reventado" a su chica han sido "las del jacuzzi".