'Encarcelados' saca los colores a nuestras embajadas

A pesar de sus responsables, los periodistas Alejandra Andrade y Jalis de la Serna no querían hacer un programa "de denuncia", lo cierto es que Encarcelados, el nuevo factualde laSexta que fue presentado este martesen el FesTVal de Televisión de Vitoria, remueve conciencias con sus imágenes exclusivas de cómo viven los españoles presos en el extranjero y saca los colores a nuestra embajadas.

"La idea no era la de denuncia, pero cuando llegamos descubrimos situaciones muy denunciables, no se respetan los derechos humanos y tras los reportajes esperamos que algo cambie”, comentó Andrade en la rueda de prensa.

De momento, la casualidad ha querido que el arranque deEncarceladoseste jueves a las 22:30 horas con una entrega dedicada a las cárceles de Bolivia coincida con la visita dos días antes del presidente boliviano Evo Morales a nuestro país.

En el reportajese observa el hacinamiento, la falta de comida, las nefastascondiciones higiénicas y también la violencia de "situaciones que rayan la violación de los Derechos Humanos", explicóDe la Serna.

Para Andrade, unas de las cosas más duras de su periplo por treinta penales de Perú, Brasil, Colombia, Bolivia, República Dominicana, Costa Rica y El Salvador, ha sido "ver a niños viviendo en esas condiciones en las cárceles con sus familias".

Una situación habitual en muchas de esas prisiones donde cumplen condena los 120 hombres y mujeres entrevistados para el programa, un trabajo que ha ido desde los penales de violentos "Maras" a los de máxima seguridad de Brasil, y para que el equipo de producción ha tenido que negociar el acceso "con los capos" de la prisión.

Capos que en muchos casos alquilan una celda o incluso cobran por dormir en el suelo, cuando no extorsionan y torturan para conseguir dinero, como le ocurrió a Narcís, un pequeño empresario catalán.

Otro preso reclama a la embajada española ayuda para arreglarse la dentadura, que ha perdido debido a las palizas y a la condiciones de salubridad del penal."La mayoría de los presos están descontentos por la atención que les presta el consulado, pero no nos metemos a valorar el trabajo de las autoridades españolas en esos países", explicó De la Serna, quiénrecordóque los consulados ayudan mensualmente con dinero a los presos españoles.

Hay 2.500 presos españoles en todo el mundo, de los que 1.500 están en algunas de las prisiones más conflictivas de América Latina, la mayoría por delitos relacionados con las drogas.Las detenciones relacionadas con el tráfico de drogas han aumentado un 30 por ciento en los últimos años, "porque muchos españoles prueban suerte como mulas para conseguir dinero", explicóAndrade.