Así está ahora el megarascacielos saudí de 170 km de largo 'The Line'

Neom es el sueño del príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed bin Salman, de crear una “nueva Europa” y “revolucionar nuestra civilización”. The Line es la punta de lanza de este sueño: un descomunal rascacielos horizontal que es una ciudad en un solo edificio, no una serie de edificios consecutivos ensamblados uno al lado del siguiente.

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Tendrá dos bloques paralelos —cada uno de 488 metros de altura, más de 40 por encima del Empire State Building— que unirán los 170 kilómetros que separan el golfo de Aqaba con el desierto a través de una cadena montañosa.

El megaproyecto cuenta con un presupuesto de un billón de euros y las primeras fases podrían estar listas en 2030, según sus responsables. Para alcanzar esa fecha, primero hay que dejar listos los cimientos en tiempo récord. El nuevo vídeo, publicado recientemente por Neom, muestra decenas de excavadoras y camiones que trabajan las 24 horas al día, 7 días a la semana, para mover millones de metros cúbicos de tierra y agua cada semana.

Este video puede ser la respuesta Saudí a un reciente artículo del Wall Street Journal. El medio estadounidense asegura que el efectivo del fondo que el reino ha creado para sufragar estas faraónicas obras se redujo aproximadamente en tres cuartas partes (hasta unos 15.000 millones de dólares) en el último mes. Esto, dice el diario económico, sería el nivel más bajo desde diciembre de 2020, que es cuando el fondo empezó a compartir sus datos.

Por otro lado, Arabia Saudí ha arrancado el año con dos grandes ofertas de deuda pública y, según explica el WSJ, también ha recurrido al endeudamiento para poder mantener abierto el grifo de gasto. Sin embargo, la caída del precio del petróleo unido a la subida de los intereses se lo va a poner difícil.

Karen Young, investigadora del Instituto de Oriente Medio y de la Universidad de Columbia, en EEUU, afirmó para el medio neoyorquino que muchos de los grandes proyectos pueden verse frenados o paralizados a medida que aumenten los costes y se aclare su eficacia. Aunque es probable, dice, que el reino saudí siga inyectando dinero en durante los próximos años. "Creo que se producirá un derroche hasta 2030 y luego habrá un castigo", afirma la investigadora.

Además de las críticas a la viabilidad económica de The Line, destacados arquitectos llevan tiempo avisando del despropósito que suponen algunos de estos planes a nivel urbanístico