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Francia ordena la paralización del reactor ITER por problemas de construcción
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Orden de la agencia nuclear francesa

Francia ordena la paralización del reactor ITER por problemas de construcción

La autoridad de la seguridad nuclear francesa ha paralizado la construcción del ITER después de descubrir graves defectos en dos de los sectores del tokamak

Foto: La columna central del tokamak en el pozo del reactor ITER.
La columna central del tokamak en el pozo del reactor ITER.

Han paralizado la construcción del reactor de fusión nuclear ITER por defectos de fabricación importantes. Es el enésimo parón —y retraso por ahora indefinido— de una de las grandes esperanzas de la humanidad para encontrar la producción de energía limpia.

Foto: Una ilustración conceptual de la propuesta de Quaise (Quaise)

Según el 'New Energy Times' —una publicación especializada en el seguimiento de la energía nuclear en general y el proyecto ITER en particular—, la orden tajante que ha detenido la construcción ha venido directamente de la Autorité de Sûreté Nucléaire (ASN), la agencia de seguridad nuclear francesa que vela por la correcta operativa de cualquier instalación o material atómico.

Qué ha pasado

La carta que ordenaba la paralización llegó el 25 de enero, pero hasta ahora no ha salido a la luz. Firmada por el presidente del consejo de dirección de la ASN —Bernard Doroszczuk— la carta no autoriza a la organización ITER a ensamblar los primeros dos sectores de la cámara de vacío del tokamak, el corazón del reactor de fusión donde se produce la reacción nuclear.

placeholder Uno de los sectores del tokamak. (ITER)
Uno de los sectores del tokamak. (ITER)

Según la evaluación de la ASN y los técnicos, no se puede garantizar la seguridad de la operación del ITER después de comprobar graves problemas de fabricación en los dos sectores construidos en Corea del Sur.

En un episodio chapucero digno de Pepe Gotera y Otilio —que el 'New Energy Times' relató el pasado noviembre—, la ASN afirma que los dos sectores se cayeron al suelo en la fábrica y “sufrieron distorsión dimensional”. En otras palabras: se abollaron. Aun así, los enviaron al centro ITER para su reparación e instalación, en vez de hacerlo en la fábrica. Cada sector pesa cientos de toneladas: solo en acero utilizan 440 toneladas cada uno. La cámara de vacío medirá un total 19,4 metros de diámetro y 11,4 metros de altura, con un peso de unas 5.200 toneladas sin contar con el resto de componentes que rodean la cámara (en total, el peso será de 8.500 toneladas).

placeholder Un rénder del tokamak ITER en comparación a un humano. (ITER)
Un rénder del tokamak ITER en comparación a un humano. (ITER)

Los técnicos del ITER debían haber bajado el primer sector a su posición final el pasado mes de diciembre. A pesar de los defectos conocidos, su propuesta fue instalarlos de todas formas y arreglar los desperfectos dentro del pozo del tokamak.

Finalmente, la operación se canceló porque —si algo fuera mal— la organización no podría desinstalar los sectores y el proyecto terminaría en desastre después de miles de millones de euros invertidos. Según un portavoz de la ASN, "la soldadura de estos sectores [dentro del pozo del tokamak] es una operación irreversible, que necesita la aprobación formal de ASN para tener lugar".

Problemas de seguridad serios

Según la ASN, los defectos de estos sectores representan un peligro serio para la seguridad de los trabajadores y todo el proyecto. Si el ensamblaje y soldaduras no son perfectas, la radiación gamma y los neutrones generados durante el proceso de fusión afectarían a los humanos en la instalación. Aunque las reacciones de fusión no tienen el mismo peligro que las de fisión —su radiación ionizante generada es demasiado efímera y de corto alcance para afectar a la población civil—, sí que pueden ser peligrosas para los trabajadores.

“Teniendo en cuenta los elementos mencionados anteriormente, ASN considera que esta condición [de seguridad] no se cumple en esta etapa”, afirma la agencia de seguridad. “Consecuentemente, se suspende el ensamblaje del tokamak. En el futuro inmediato, le insto a que no tome ninguna medida que sea difícil de revertir con respecto a los sectores de la cámara de vacío afectados por las no conformidades dimensionales, para no obstaculizar su capacidad de llevar a cabo las reparaciones que se considerarían útiles con miras a su soldadura”.

El problema es tan serio, continua, que la agencia “invita” a realizar una “gran revisión” de todos los parámetros físicos de la cámara de vacío antes de poder continuar. La construcción del tokamak, dicen, continuará paralizada hasta que ITER sea capaz de satisfacer las demandas de la ASN. En definitiva, malas noticias de nuevo para uno de los retos de ingeniería más ambiciosos y emocionantes de los últimos tiempos.

(Actualización: 14/02/2022): Según Aris Apollonatos, responsable de comunicaciones del departamento administrativo de Fusion for Energy — la organización que gestiona la contribución europea del ITER, basada en Barcelona — la prohibición del montaje de la ASN no impactará el calendario de montaje del ITER: "El montaje del tokamak empezó en el 28 de julio de 2020. De hecho hay piezas instaladas dentro la máquina. El trabajo de soldaduras de los dos sectores no pueden avanzar hasta que ASN mire la documentación adicional. Pero estos meses de retraso no impiden los avances de montaje de otras piezas porque trabajamos en paralelo".

Apollonatos añade lo dicho por el director general de la organización ITER, Bernard Bigot: los “retrasos por el COVID-19 ya habían retrasado el comienzo de la soldadura [de los sectores del tokamak] a Julio. Si la ASN acepta las explicaciones del ITER en April, ese calendario se puede mantener." Múltiples medios se han hecho eco de la parada ordenada por la ASN, incluyendo la prestigiosa revista científica Science, que también recoge las declaraciones de Bigot reproducidas sobre estas líneas y repetidas por Apollonatos. Es falso, aseguran los del ITER, que los sectores se cayeran al suelo como afirma en su informe la agencia de seguridad nuclear francesa.

Pero, como señala el diario Público, el antiguo jefe de prensa de ITER — Michel Claessens dice que esta parada señala graves dificultades para el ITER. Claessens afirma que "es un problema muy grave. La ASN requiere una profunda revisión del diseño completo antes de que pueda autorizar que comience el montaje del tokamak dentro del criostato".

El hecho es que el estado del ITER es hoy en día una bomba de relojería política para esta organización internacional. A los años de retraso acumulados se les ha sumado ahora esta orden de parada, que es real aunque Bigot asegure que el retraso ya estaba planeado. Algo que afirma aunque todavía nadie conoce el tiempo efectivo de la parada del montaje del tokamak porque nadie sabe si la ASN dará el visto bueno a sus explicaciones en abril.

El propio Claessens, apunta Público, ha declarado "en una sesión especial sobre el ITER en el Parlamento Europeo como denunciante de las quejas que le han hecho llegar algunos de sus antiguos colegas, tanto en Cadarache [como en Barcelona]". Claessens declaró ante la comisión del parlamento que sus "colegas en ITER hablan de un proceso de toma de decisiones defectuoso, de la enorme dimensión política del proyecto", añadiendo que "la cúpula del ITER quiere salvar la cara como sea, que ha establecido una forma política de gestión, que califica de tóxica, dentro de un proyecto científico y no escuchan lo suficiente a los expertos, imponiendo una cultura de miedo y desinformación que lleva a numerosas dimisiones y también despidos". Al parecer, ha habido sindicalistas que también han realizado denuncias similares ante la misma comisión parlamentaria, lo que sin duda aumentará aún más el conflicto entre la visión oficialista que nos ha hecho llegar Apollonatos y la versión de los críticos que han declarado ante Europa.

A día de hoy, el montaje de los sectores en el tokamak sigue parado.

Han paralizado la construcción del reactor de fusión nuclear ITER por defectos de fabricación importantes. Es el enésimo parón —y retraso por ahora indefinido— de una de las grandes esperanzas de la humanidad para encontrar la producción de energía limpia.

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