Lío en las universidades por el coronavirus: ¿qué pasa ahora con mi beca Erasmus?

Es uno de los temas más candentes desde que estalló el brote de coronavirus en el norte de Italia: ¿qué pasa con los Erasmus? Miles de estudiantes cursan sus clases en universidades de la zona que ahora permanecen cerradas hasta nueva orden, y entre ellos hay alumnos de toda Europa (varios cientos de origen español). Con el cierre de centros y las otras medidas tomadas en la zona para frenar el contagio ya ha habido estudiantes que han decidido volver a su casa por su cuenta y riesgo, pero ante el goteo de dudas y peticiones, la Comisión Europea tomó este jueves una decisión que responde a una pregunta clave: ¿qué pasa si estoy en una zona de riesgo y cancelo ahora mi beca Erasmus? Eso sí, aún quedan puntos, locales, por resolver.

Ante la presumible avalancha de estudiantes que empezaban a optar por volver a sus lugares de origen por todo lo ocurrido con el virus, y presionados por la incertidumbre expresada por alumnos y familiares, desde las instituciones de la Unión Europea han optado por una solución que intenta calmar a todas las partes: todo estudiante que quiera renunciar a su beca lo podrá hacer sin perjuicios para su año lectivo y el que decida quedarse mantendrá su estatus como hasta ahora. ¿El problema de todo esto? Pues que lanza la pelota al tejado de las instituciones locales y dejando, al menos en el caso de España, a universidades y otros centros ante una importante encrucijada que no todos se atreven a atajar, al menos de momento.

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Guillermo Cid

Tanto la UE, a través de la CE como, en el caso de España, el SEPIE (Servicio Español para la Internacionalización de la Educación) han tomado esta decisión apoyándose en la "la cláusula de fuerza mayor prevista en el convenio" de las becas Erasmus+. ¿Qué dice esta cláusula? Pues, si nos ceñimos al texto, el convenio explica que "en caso de rescisión por parte del participante por causas de fuerza mayor, esto es, debido a una situación o acontecimiento imprevisible y excepcional ajeno a la voluntad del participante y no atribuible a error o negligencia por su parte, el participante tendrá derecho a percibir la cuantía de la ayuda correspondiente a la duración real del período de movilidad". Es decir que aclara que el estudiante en zona de riesgo puede cancelar sin perder su beca, pero deja alguna incógnita.

La duda queda en lo referente a la reintegración del estudiante en el curso lectivo de su universidad de origen y en qué costes costeará dicho centro o las autoridades competentes. En este caso, la CE ya ha dicho que costeará los viajes de vuelta de los estudiantes que lo pidan, pero nada se sabe sobre el asilo o los gastos deducidos de la movilidad. Y en las universidades españolas, últimas responsables de todo esto, también hay disparidad de opiniones en este sentido. Desde El Confidencial, además, nos hemos puesto en contacto con el SEPIE, pero no hemos recibido respuesta en el momento de la publicación de este artículo.

Las universidades miran al SEPIE

El convenio deja claro que "cualquier fondo restante (de la cuantía de la beca) deberá ser devuelto, salvo si se acordaran otros términos con la organización de envío", pero ante una cláusula tan abierta las universidades consultadas por Teknautas toman, de momento, decisiones bastante dispares. La UCM, la universidad presencial más grande de España y uno de los centros nacionales con más Erasmus en Italia (unos 255), deja claro que el alumno que así lo desee se reintegrará al curso sin problemas y solo recibirá la cuantía de la beca hasta el fin de su estancia en el país de destino. Otra de las grandes universidades españolas, la UAB (más de 80 estudiantes en Italia), opta por esperar a ver qué decide el SEPIE. "Son ellos los que deben dar las directrices", explican desde el centro barcelonés.

El lío en las universidades españolas es bastante importante ya que hay una gran disparidad de protocolos entre las diferentes regiones. En el País Vasco hace ya días que sus universidades pidieron a sus estudiantes volver a su lugar de origen y recobrar sus estudios en las facultades de las que partieron a su Erasmus, pero en otras regiones siguen aún con la política de vigilar a sus estudiantes, pedirles que sigan las instrucciones de las autoridades locales y esperar a ver cómo evoluciona todo. Lo que sí explican tanto desde la UCM como desde la UAB es que, al menos en sus centros, son muy pocos los estudiantes que, hasta ahora, han anunciado su vuelta y la cancelación de su beca.

Habrá que ver cómo evoluciona la situación pero ante los cambios que empieza a mostrar la enfermedad y el crecimiento de los casos es más que probable que la universidad española se tenga que preparar para una vuelta masiva de estudiantes a los que tendrán que dar cabida en los diferentes cursos. De darse esta ocasión veremos si se mantiene esta política de facilitar la vuelta de estudiantes y reintegración en los diferentes cursos, pero al menos por ahora hay que tener claro que todo estudiante en zona de riesgo podrá volver a España sin perder ni un curso ni un euro de su beca disfrutada. Otra cosa será ver cómo de fácil es volver a la normalidad.