Científicos detectan por primera vez el momento en el que se crea un agujero negro

El pasado mes de junio, dos telescopios espaciales de Hawaii detectaron un brillo poco habitual y de origen desconocido. Procedía de una constelación a 200 millones de años luz de distancia y los científicos le pusieron un nombre con el sistema automático que se utiliza para estos casos. Lo llamaron AT2018cow para comenzar a estudiarlo y el apodo ante ese nombre estaba claro: ‘la vaca’.

Ahora, los astrónomos creen que pueden estar ante la primera vez que el ojo humano es capaz de ver el momento exacto en el que una estrella que colapsa se convierte en un agujero negro. La directora del equipo y astrofísica de la Northwestern University, Raffaella Margutti, asegura al National Geographic que "este es el objetivo que hemos estado esperando durante años".

Pero, ¿qué hace que 'la vaca' sea tan poco habitual? No es el primer destello de este tipo que surca el cielo, pero sí el más cercano detectado nunca. Esto permite a los científicos estudiar un fenómeno sin precedentes que, además, fue mucho más impactante de lo normal. Los registros que se consiguieron de ‘la vaca’ muestran que era diez veces más luminosa que las explosiones estelares normales, las llamadas supernovas.

Además, alcanzó su brillo máximo en apenas unos días, mientras las supernovas tardan semanas en hacerlo. En dos semanas ‘la vaca’ había desaparecido después de que algunas de sus partículas viajaran a más de 30.000 kilómetros por segundo.

Dos escenarios probables

Otro dato que llamó poderosamente la atención de los investigadores es la cantidad de materia y residuos que se desprendió de ‘la vaca’. Normalmente son cantidades ingentes de materia, que además nublan cualquier visión desde telescopios como los que existen hoy en día, pero esta vez apenas se registró un 10 por ciento de esa cantidad de materia, lo que permitió poder observarlo todo con mucha más nitidez. Incluso encontraron restos de nitrógeno y helio, algo que no debería estar ahí en condiciones normales ya que se suelen quemar como combustible nuclear.

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G.C.

Pensaron que habían hecho algo mal, por lo que el equipo de Margutti pidió a la NASA apuntar el telescopio de rayos X NuSTAR hacia el objeto y usaron análisis tanto de rayos X como de rayos X duros, diez veces más potentes. El consenso al que llegaron es que existe un "motor central" en el centro de ‘la vaca’ que emite rayos X de alta energía.

Los investigadores llegaron a la conclusión de que se encuentran ante dos opciones. En la primera, ‘la vaca’ sería una estrella de neutrones altamente magnetizada que gira mil veces por segundo. En la segunda, una estrella azul supergigante colapsó y, tras una explosión fallida, se convirtió en un agujero negro. Éste es el escenario por el que más se decantan y los humanos habríamos sido testigos por primera vez de su creación.