¿Qué pasa si uso emojis en mis contraseñas?

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En mayor o menor medida, todos somos conscientes de la importancia que tiene crear contraseñas únicas y seguras para nuestras cuentas de correo electrónico, de redes sociales o, en general, de cualquier otra plataforma. No importa si tienen carácter personal o profesional. Sin embargo, elaborarlas y luego recordarlas no es tan sencillo como puede parecer, sobre todo, si no utilizamos un generador de contraseñas o hemos empezado a usar passkeys.

Por este motivo, no es de extrañar que algunos expertos estén recomendando a los usuarios sustituir las tradicionales letras en mayúscula y minúscula, números y símbolos por emoticonos. Esto es posible en muchas plataformas gracias a que forman parte del estándar Unicode y a que entrañan un nivel de complejidad tan elevado como los propios alfabetos o los signos de puntuación.

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Hay un hecho objetivo por el cual una contraseña elaborada con emojis supone un desafío mayor para los hackers que una elaborada con letras, números y signos. En caso de usar estos últimos, el número de variantes por cada carácter de la clave es inferior a 100. Sin embargo, Unicode ha estandarizado en torno a 3.600 emoticonos. Es decir, la complejidad de la contraseña se multiplica, aproximadamente, por 36. Para hacernos una idea, una contraseña formada por cinco emojis es igual de compleja que una que contenga ocho caracteres clásicos.

Por su parte, los emojis son más fáciles de memorizar que los conjuntos alfanuméricos sin sentido aparente. Además, los hackers no suelen utilizar este tipo de símbolos al realizar ataques de fuerza bruta. Es más, no hay ninguno registrado hasta la fecha que haya tratado de explotar esta vía. Pero esto no quiere decir que las contraseñas creadas a partir de emoticonos no tengan inconvenientes, como vamos a ver a continuación.

Desventajas de las contraseñas con emojis

El hándicap más importante de todos es que muchas plataformas no aceptan el uso de emoticonos. Es el caso, por ejemplo, de los servicios de correo electrónico Microsoft Outlook y Gmail. También hay que tener cuidado de no extraviar el dispositivo o de dejarlo en las manos equivocadas, ya que el registro reciente del teclado podría delatarnos. Además, no podemos obviar que los emojis son mucho más fáciles de introducir en el cuadro de texto a través de un teléfono móvil que usando un ordenador portátil o de sobremesa.

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Pero ¿cómo introducir los emojis en la contraseña en función del sistema operativo? En Windows 10 y 11 solo tendrás que pulsar a la vez las teclas 'Win' y 'punto' o 'Win' y 'punto y coma'. En cambio, en macOS basta con presionar sobre el botón 'FN' que hay en la esquina inferior izquierda del teclado. En las configuraciones de Ubuntu Linux posteriores a la versión 18, este cuadro se abre al darle simultáneamente a 'Win' y 'punto'.