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Invertir en criptomonedas es de derechas: retrato ideológico del 'crypto bro'
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liberales y conservadores, a la cabeza

Invertir en criptomonedas es de derechas: retrato ideológico del 'crypto bro'

Entre los inversores en criptomonedas predominan ideologías liberales, conservadoras y libertarias. En España, por cierto, ya hay más inversores en criptomonedas que en acciones

Foto: Foto: Unsplash.
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"Las criptomonedas son una tecnología hipercapitalista inherentemente de derechas construidas principalmente para ampliar la riqueza de sus defensores en una combinación de evasión fiscal, supervisión regulatoria disminuida y escasez impuesta artificialmente". Esta frase no la ha dicho ningún crítico de las criptomonedas, ningún cargo de la CNMV ni ningún miembro del Gobierno. La dijo hace pocos meses nada menos que Jackson Palmer, el creador de DogeCoin, una de las monedas virtuales más exitosas de todo el mundo.

¿Es esto cierto? ¿De verdad las personas de derechas son más adeptas a las criptomonedas? ¿Acaso estas monedas virtuales no nacieron de una filosofía predominantemente anarquista? Más allá de filosofías, los datos en este caso son claros: los perfiles dominantes en la inversión en criptomonedas, los autodenominados 'crypto bros', son de derechas.

Conservadores, liberales y libertarios, a la cabeza

Vayamos por partes. ¿Hay alguien que haya preguntado a estos inversores qué ideas políticas tienen? Lo cierto es que sí. Lo hizo Coindesk, uno de los portales más especializados en esta materia. En uno de sus informes, preguntó directamente a 1.200 inversores por su ideología. Como vemos en el siguiente gráfico, los liberales, los libertarios y los conservadores fueron los más representados.

El informe, verdaderamente indagador, incluso analiza la ideología en función de la criptomoneda invertida. Como vemos, los liberales son mayoría en la mitad de ellas, mientras que los libertarios encabezan el 'ranking' en Bitcoin Cash y en Dash, los conservadores en Litecoin y los anarcocapitalistas en XMR.

En el informe hay otro factor especialmente curioso: el aspiracional. Coindesk les preguntó a sus encuestados si se habían convertido en criptomillonarios en ese año y si esperaban hacerlo el siguiente. Los datos hablan por sí solos: solo el 8% aseguró haberse hecho millonario..., pero el 28% aspiraba a convertirse en ello en un plazo de apenas un año.

Lo más llamativo de todo esto es que, pese a que muchas personas se lanzan a por las criptomonedas aspirando a conseguir grandes beneficios o incluso a ser millonarios, los datos, una vez más, deberían apagar el entusiasmo, al menos en el caso de Bitcoin: según la investigación realizada por Bitinfocharts, el 4% de las direcciones de bitcoins posee el 96% de todos estos activos, mientras que las 1.000 personas más ricas poseen el 40%; además, el 70% más pobre de los propietarios de bitcoins ni siquiera llega a atesorar el 1,7% de todas las existencias. Estos datos podrían devolvernos a la frase de Jackson Palmer que abre este artículo: "Las criptomonedas son una tecnología hipercapitalista inherentemente de derechas construidas principalmente para ampliar la riqueza de sus defensores". Concretamente, los defensores que se han hecho ricos o que ya lo eran de antes.

Hay otros estudios que han focalizado sus investigaciones en países concretos. No hay ninguno que pregunte directamente a sus encuestados por la ideología, pero en sus respuestas sí hay motivaciones claramente ligadas a diversos pensamientos políticos. Por ejemplo, ¿por qué invierten en criptomonedas en Estados Unidos y en Gran Bretaña? El principal factor es el crecimiento de la inversión, pero hay otros llamativos como evitar la regulación de sus gobiernos, algo que atrae al 18% de los norteamericanos y al 8% de los británicos. Aunque, para bien o para mal, quizá lo que más sorprende es que el 45% de los primeros y el 41% de los segundos invierte "simplemente por diversión", algo que no es exclusivo de estos dos países: el 38% de los inversores en criptomonedas surcoreanos se dedican a ello porque es "como jugar a videojuegos".

En otros países de nuestro entorno hay tendencias similares. En Francia, por ejemplo, el 33% de los 'crypto bros' invierte por el beneficio que presume que le darán las criptomonedas. El 19%, por su parte, porque no están reguladas por el Estado, y el 14% por cuestiones ideológicas, aunque sin entrar en detalles.

Un origen anarquista... ¿o anarcocapitalista?

Un momento: ¿las criptomonedas no nacieron en una filosofía anarquista y más vinculadas a la izquierda que a la derecha? Si Satoshi Nakamoto, el supuesto creador del bitcoin, tenía fuertes inclinaciones anarquistas y libertarias, ¿no estaremos errando en el diagnóstico? Quizá no. Y es que el anarquismo socialista o colectivista, el que la mayoría de personas conocemos a través de figuras como la de Bakunin, difiere significativamente del llamado anarquismo individualista, mucho más arraigado en Estados Unidos. Mientras el primero defiende teorías como la colectivización de la propiedad y lucha contra el Estado, por poner un ejemplo sencillo, el segundo no lucha necesariamente contra la propiedad privada ni contra el mercado libre, solamente contra el Estado.

En este sentido, el anarquismo individualista estadounidense estaría más cerca incluso del anarcocapitalismo. De hecho, incluso el término 'libertario', del que presumen mucho de los encuestados en los informes antes mostrados, tiene unas implicaciones distintas a las que podríamos pensar en los países europeos. Un libertario en Estados Unidos no vota precisamente a la izquierda. Es más, según un informe del Cato Institute, cuando los autodenominados libertarios de Estados Unidos han tenido que votar, los resultados han sido claros: el Partido Republicano representaba una clara mayoría.

España: más inversores en 'cripto' que en acciones

Ideologías y filosofías aparte, la inversión en criptomonedas está en auge y España no es ni mucho menos una excepción. Según un informe de Asufin, el 11,2% de los españoles invierte en criptomonedas. Estos datos cobran más relevancia si los comparamos con el estudio 'Educación financiera y decisiones de ahorro e inversión: un análisis de la Encuesta de Competencias Financieras (ECF)', elaborado por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que establece que el 3% de la población de nuestro país invierte en fondos de inversión o acciones. Es decir, en España hay más gente invirtiendo en criptomonedas que en fondos o acciones.

Además de los datos absolutos de inversión, hay otros tres interesantes en el informe de Asufin. En primer lugar, que el 26% de los 'crypto bros' españoles han invertido más de 6.000 euros. En segundo lugar, que el 40,9% considera que invertir en criptomonedas es una "apuesta segura". Y, en tercero, y quizás esto sea lo más llamativo, apenas el 30,2% conoce las implicaciones fiscales de la inversión en criptomonedas. Es decir, menos de un tercio de los inversores españoles en criptomonedas sabe que debe pagar impuestos por las ganancias, mientras que el 41,4% se muestra convencido de que no debe pagar un solo euro por ellas.

Y en esas andamos, tanto en España como en el resto del mundo. Si las criptomonedas nacieron en su momento en una aparente filosofía anarquista, a día de hoy, a tenor de los datos, sus mayores entusiastas se corresponden con ideologías liberales, conservadoras e incluso libertarias. Todo ello en un contexto en que dichos inversores no paran de crecer, aunque no sean del todo conscientes del riesgo y las implicaciones fiscales que lleva asociado este tipo de inversión.

"Las criptomonedas son una tecnología hipercapitalista inherentemente de derechas construidas principalmente para ampliar la riqueza de sus defensores en una combinación de evasión fiscal, supervisión regulatoria disminuida y escasez impuesta artificialmente". Esta frase no la ha dicho ningún crítico de las criptomonedas, ningún cargo de la CNMV ni ningún miembro del Gobierno. La dijo hace pocos meses nada menos que Jackson Palmer, el creador de DogeCoin, una de las monedas virtuales más exitosas de todo el mundo.

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