Es noticia
Repartidores de Amazon cuelgan móviles en los árboles para conseguir más pedidos
  1. Tecnología
COMPETENCIA FEROZ

Repartidores de Amazon cuelgan móviles en los árboles para conseguir más pedidos

Consiguen unas décimas de ventaja sobre otros repartidores que pueden ser fundamentales para engañar al sistema que decide quién llevará cada envío

Foto: Un repartidor de Amazon prepara sus pedidos (Reuters/Shannon Stapleton)
Un repartidor de Amazon prepara sus pedidos (Reuters/Shannon Stapleton)

Flex es un sistema que Amazon utiliza para distribuir sus envíos por medio de repartidores autónomos, sin tener que recurrir a empresas de logística. El gigante del comercio online paga a esos repartidores por cada paquete que llevan a un destino y conseguir el mayor número de envíos posible es el objetivo de todos los repartidores. Por eso, han ideado una estrategia para conseguir el mayor número posible de paquetes.

Los repartidores de la ciudad de Chicago colocan teléfonos móviles en lo alto de algunos árboles de la ciudad y los conectan a sus propios terminales. De esa manera, tratan de aprovecharse del programa de Amazon que monitorea a sus repartidores para ver dónde se encuentran: los que están más cerca del centro de reparto se llevan más pedidos.

Aunque la medida parezca excesiva, colocando esos terminales en una posición más alta consiguen unos milisegundos que pueden ser decisivos para que el software que utiliza Amazon les proporcione más pedidos que a otros repartidores. La competencia es feroz… sobre todo en una economía devastada por la pandemia del coronavirus.

La importancia de un pedido

Una persona que conoce cómo funciona el sistema explica a Bloomberg que, en un área urbana con buena cobertura de móvil y abundantes accesos por WiFi, el sistema puede detectar la ubicación de un smartphone de una forma muy precisa. Por eso, colocar un teléfono en un árbol cercano a algunos de los lugares de donde salen la mayoría de los pedidos puede ser definitivo para hacerse con el reparto.

La competencia es brutal en un país donde la pandemia ha eliminado millones de puestos de trabajo

Sin embargo, no todos los repartidores operan de esa manera. Algunos se han quejado a los responsables de Amazon por lo que consideran competencia desleal y la compañía de e-commerce se ha comprometido a investigarlo. Eso sí, no dará a los afectados ninguna explicación sobre lo que depare esa investigación para que los trapos sucios queden en casa.

De fondo hay un problema del que algunos repartidores acusan a Amazon: para poder ser miembro del sistema Flex hay que cumplir unos requisitos, como tener permiso de trabajo en Estados Unidos o un carné de conducir válido. Por eso, hay personas que se quedan con algunas de las rutas que Amazon ofrece a 18 dólares la hora y, después, las subcontratan a otra persona a la que solo le paga 10 dólares. Por eso, quedarse con los pedidos que se pagan de manera independiente es fundamental para poder sobrevivir en la gran ciudad.

Flex es un sistema que Amazon utiliza para distribuir sus envíos por medio de repartidores autónomos, sin tener que recurrir a empresas de logística. El gigante del comercio online paga a esos repartidores por cada paquete que llevan a un destino y conseguir el mayor número de envíos posible es el objetivo de todos los repartidores. Por eso, han ideado una estrategia para conseguir el mayor número posible de paquetes.

El redactor recomienda