Es noticia
Un estudiante recibe las iras en Twitter de viajeros de Qantas
  1. Tecnología
Lo confunden con el ceo de la compañía

Un estudiante recibe las iras en Twitter de viajeros de Qantas

Alan Joyce amanecía un día como otro con 300 nuevos followers en su cuenta de Twitter. Le habían confundido con uno de los personajes más odiados en Australia

Foto:

Alan Joyce amaneció temprano. Se trataba de un día más y tocaba ir a la universidad de Stanford, donde el joven cursa sus estudios de informática. Sin embargo, aquel iba a resultar un día muy extraño. Encendió su móvil y descubrió que de la noche a la mañana contaba con 300 nuevos followers (seguidores) en su cuenta de Twitter.

Extrañado, abrió su perfil en esta red social para descubrir su cuenta inundada de mensajes furibundos que no alcanzaba a entender. Insultos, descalificaciones... El joven no comprendía nada. Has dejado en tierra a toda mi familia”, “Me voy a perder Halloween por tu culpa, son solo algunos de los mensajes que el pobre estudiante recibió sin conocer el motivo. Atónito, decidió encender la televisión y dio con la clave: en el informativo estaban cubriendo la súbita cancelación de vuelos por parte de Qantas, y mencionaban a su CEO: Alan Joyce.

A nuestro Joyce todo le encajó finalmente en el puzzle. Le habían confundido con uno de los personajes más odiados en aquel momento en Australia. A partir de este punto, los hechos de desencadenaron de forma vertiginosa. Nuestro protagonista intentó en un primer momento aclarar el malentendido mediante mensajes en Twitter pero era ya demasiado tarde.

Los insultos, una constante en la red

La mecha estaba prendida y el asunto era ya imparable. “En ese momento decidí relajarme, observar la situación como un espectador”, confesó el estudiante a una emisora de radio australiana. Y es en este punto cuando salió a relucir el divertido carácter del protagonista accidental. “Oh cielos, Australia amanece de nuevo... me preparo para el bombardeo”, escribiría en su cuenta de Twitter haciendo gala de un gran sentido del humor. Y seguían lloviendo los mensajes, ahora ya de todo tipo.

Los insultos y descalificaciones eran una constante, pero también los que agradecían su buen humor. Sus amigos no perdieron la ocasión y se divertían escribiendo “hey Alan, no sabíamos que llevabas una línea aérea”.

De villano a héroe. Joyce comenzó a disfrutar de la situación. Me llegaron a pedir recomendaciones sobre itinerarios de vuelo o me acusaron de tener un sueldo muy alto”, reconocería divertido y sin perder la sonrisa. Pero la simpatía y el talante que rebosaba el estudiante no han pasado desapercibidos en Australia. Los antes indignados usuarios en Twitter ahora le dan consejos: “deberías escribir un libro”, y son varios los medios que se han puesto en contacto con el cotizado estudiante ahora convertido en héroe nacional.

Qantas, por su parte, se ha puesto en contacto con el de California y le ha pedido públicamente disculpas por el malentendido, algo que muchos australianos han visto como un detalle pobre dadas las circunstancias: “Deberíais pagarle unas vacaciones en Australia”, solicitan en algunos mensajes. Joyce, entre tanto, sigue acumulando followers y divirtiendo a su sobrevenida audiencia: “Hey, ¡747 followers! he olvidado celebrar las marcas 330, 380 y 737” (en clara alusión a los diferentes modelos de aviones).

Pero todavía queda alguno que le sigue confundiendo con el CEO de Qantas y le escribe: apoyo al 100% tu decisión de mantener todos los aviones en tierra. Nuestro Joyce no pierde ocasión: “Gracias por el apoyo, pero mi único acierto ha sido el de registrar un nombre popular en Twitter”.

Alan Joyce amaneció temprano. Se trataba de un día más y tocaba ir a la universidad de Stanford, donde el joven cursa sus estudios de informática. Sin embargo, aquel iba a resultar un día muy extraño. Encendió su móvil y descubrió que de la noche a la mañana contaba con 300 nuevos followers (seguidores) en su cuenta de Twitter.

El redactor recomienda